El inicio de los trabajos de desmantelamiento de la Central Térmica de Andorra, en cuyas labores trabajan ya unas 40 personas que se convertirán en 70 en el próximo mes de marzo, insuflará «algo de oxígeno» en la Villa Minera, una localidad muy castigada por la pérdida de empleo debido a la descarbonización que ya comenzó con el cierre de minas hace dos décadas y terminó en junio de 2020 definitivamente con el cese de la actividad de la planta térmica de Endesa.
Las primeras labores se desarrollan en el parque de carbones y los trabajos específicos se presentarán este jueves a los medios de comunicación en las instalaciones andorranas. Así como los detalles de la contratación de personal, el aspecto más importante para Andorra puesto que hay trabajadores de subcontratas que acumulan ya más de ocho meses en el paro.
Aunque los detalles los dará a conocer el propio director general de Endesa en Aragón, Ignacio Montaner, durante el acto, cabe destacar que en la última semana se han hecho públicas una veintena de ofertas de empleo en la oficina del INAEM de Andorra.
No obstante, la contratación masiva no ha llegado y se requieren más perfiles técnicos que operarios. Y es que, el grueso de los trabajos tardará en llegar. De hecho, hasta el segundo semestre del año no está previsto que las contrataciones alcancen las 140 personas. «Es por eso por lo que la gente que trabajábamos en la Central ya nos estamos buscando la vida por otros caminos. Muchos terminamos los cursos pero no nos han llamado», explica Nicolás Bespín, de la plataforma de las Subcontratas de la Central. En su caso, ha compatibilizado el curso de Endesa con uno para vigilante de seguridad con el objetivo de «abrirme más puertas», dice.
Hoy, el desmantelamiento de la Central y la instalación posterior de los parques eólicos y solares que prevé Endesa en los terrenos es el único proyecto real de creación de empleo en el municipio. «Con el desmantelamiento ganamos tiempo para trabajar en el resto de proyectos que tenemos encima de la mesa, algunos más avanzados y otros menos. Siempre con el objetivo de diversificar la economía y el tejido productivo para que Andorra no vuelva a verse afectada en un futuro por un problema de un sector concreto», apunta el alcalde de Andorra, Antonio Amador.
Sin transición Justa
Mientras Andorra se va apagando, los convenios de Transición Justa siguen sin firmarse. Hace un año, el Ministerio de Transición Ecológica citó en Andorra a más de ochenta personas entre representantes de entidades, asociaciones, centros de investigación, empresas e instituciones para iniciar un proceso de participación e implicar a la sociedad en la transición hacia un nuevo modelo energético. Laura Martín, asesora de Transición Justa de la propia ministra Teresa Rivera y de un elevado perfil técnico, se encargó de iniciar la jornada haciendo un diagnóstico pormenorizado del panorama de la comarca.
Tras aquella mediática reunión, los participantes plantearon sus propuestas y enviaron al Ministerio sus aportaciones. La firma de los convenios se fue retrasando y en noviembre de 2020 el Ministerio de Transición anunció que durante el proceso de la elaboración de los convenios de Transición Justa en la cuenca minera de Teruel se habían recopilado 140 propuestas e ideas de 69 agentes sociales, empresariales, políticos y económicos del territorio. En su calendario actualizado ese mes de noviembre, la Vicepresidencia Cuarta del Gobierno recogía que «próximamente» se haría público el «diagnóstico definitivo» tras un proceso participativo que habría terminado el «7 de junio de 2020».
No obstante, cuatro meses después los convenios siguen sin firmar. Unos convenios que, por otra parte, no se sabe si van a incluir partidas económicas, ayudas, colaboración o más compromisos sin materializar. «Esto es lo de siempre. Muchas fotos, muchas promesas y pocos hechos. Todos los partidos nos apoyan, se manifiestan con nosotros, nos escuchan… Pero a la hora de la verdad, ninguno hace nada por ayudarnos a salir de esta situación», destaca Roberto Miguel, presidente de los empresarios de Andorra.
Juan dice
Y preferencia para lis de Andorra, que nos han de venir a quitar el pan los de alrededor.
encelado dice
Tó pa mí, tó pa mí.
. dice
Por algo será.
florian flores dice
Vale, solo por ser de Andorra hay que trabajar, independientemente si eres buen trabajador o no.
Cuanta sopa boba.
En el mundo real es al revés, trabaja el que es mejor sin importar de donde eres.
Miguel Ángel dice
Hay que tener más clase Juan Andorra es puerta de los Vientos . Y nuestro discurso debe ser Generoso y Abierto . Aquí vinieron a Trabajar de todas partes de el País. Y no vamos a cambiar el discurso por TI . Vivimos en una Comunidad El Bajo Aragon
ray arturo dice
me voy a comprar un hotel . me voy a forrar con los que vengan a trabajar a la central . alquilando habiteciones ethhh