Radiante se ha despertado Alcañiz este viernes 9 de septiembre, una mañana en la que madrugadores y trasnochadores han vuelto a cruzar sus caminos. Algunos de los segundos se han sumado a los primeros para emprender el camino que lleva desde la plaza de España hasta el Santuario de la Virgen de Pueyos. Hasta allí se han desplazado cientos de personas. Todas ellas radiantes, igual que el día. Sonrientes, con sus mejores galas, ya sea con la ropa corporativa de la peña, con el traje regional, o con ropa de calle. En el Santuario se respiraba una mezcla de paz y de alegría que se echaba mucho de menos.
A base de apretones de manos, saludos cómplices desde la distancia, besos y abrazos, los alcañizanos se han sacudido la nostalgia de tanto tiempo sin verse en uno de los lugares de referencia de sus vidas. El reencuentro ha sido multitudinario, con la charanga animando a los que venían caminando y con las jotas amenizando el rato de quienes ya esperaban en el Santuario desde buena mañana.
Entonando el Himno a la Virgen de los Pueyos ha terminado la Eucaristía oficiada por el Arzobispo de Zaragoza y que ha contado con el expárroco local, Jesús Jaime, entre otros curas de poblaciones aledañas. Ha sido más especial si cabe porque ha supuesto además la despedida de Pablo Roda como párroco de Alcañiz, que pasa a ocuparse de La Fresneda y alrededores. Su puesto lo pasa a ocupar Juan Esteban, que ya forma parte de la parroquia alcañizana. «Seguiré viviendo en Alcañiz, así que nos seguiremos viendo y reuniendo aquí», dijo antes de pedir protección a la patrona. «Que Dios nos bendiga y que la Virgen de los Pueyos nos proteja hasta el año que viene. Gracias a todos», concluyó.
Tras este agradecimiento y el canto del himno, la actividad se ha trasladado a la parte trasera de la ermita, donde las cuadrillas daban buena cuenta de los almuerzos. Allí han apurado hasta la comida una buena parte de ellas, mientras otras han puesto rumbo a Alcañiz, donde la actividad fiestera que empezó con el chupinazo el jueves, siguió en las calles del casco urbano.
Resignado. dice
Lo que están haciendo con los vecinos de la plaza Joaquín Costa es un atropello.Escenarios a tres metros de las viviendas,sonido con todos los decibelios, ningún respeto a los horarios, coincidencia discoteca móvil y orquesta.
No sé qué concepto tienen ustedes de lo que son las fiestas y sobre todo, de lo que es un ciudadano.
Juan dice
No es normal lo de la plaza mendizabal en el parque pequeño niños todo el día tirando petardos no dejan ni descansar un rato va.os una vergüenza. Yo no se porque dejan tirar esos petardos a los niños solos luego vienen las lamentaciones .Un rato está bien que estamos en fiestas pero todo el día sin parar tiene cojones la cosa yo creo que tenía que estar más vigilado por la policía.