«La influencia del folclore rumano es benéfico en Occidente. Habla y enseña al mundo sobre el alma de los rumanos y su gran corazón». Es la convicción de Carol Costea, músico y docente, que lleva más de 17 años residiendo en el territorio bajoaragonés. Su amplio conocimiento de la música se ha forjado gracias a sus 15 años de experiencia como Director Subteniente de la Banda Militar de Rumanía.
Especialista en varios instrumentos- piano, acordeón y batería-, continúa su sueño desde hace 17 años en el Bajo Aragón histórico donde ejerce como profesor de música en las Escuelas de Calaceite y Andorra, además de dirigir varios grupos musicales, entre ellos, la Batucada alcañizana. «Costumbres, danza, trajes o canciones. La cultura rumana es rica y variada», asegura. Es por ello que intenta enseñarla a sus alumnos.
La música, ese lenguaje universal por antonomasia, permite «aprender sobre la vida misma», matiza. «Yo solo les puedo abrir las puertas al mundo a través de ella». Ahora habla para «Vive Rumanía» sobre la complejidad y el «valor inestimable» del folclore rumano.
Samba do matarania dice
Gran profesor y mejor persona.
Les recuerdo que la batucada es mezcla alcañizana calaceitana. Es más, se fundó en Calaceite un año antes. Que no se olvide.
Paco dice
No si aquí tenemos nuestra. música ya