El Ayuntamiento de Caspe aprobó por unanimidad, y de manera definitiva, la modificación del contrato de recogida de residuos sólidos en el pleno ordinario celebrado este jueves, el primero de este 2022. Además, se aprobó la convocatoria y las bases para la concesión de subvenciones en materia de cultura. También se atendió la moción presentada por el Grupo Popular para instar al gobierno al cese inmediato del ministro Garzón tras sus declaraciones sobre las macro explotaciones, la ganadería y el sector cárnico. Aún con el voto favorable del PP y Ciudadanos, el grupo de gobierno (PSOE y CHA) votó en contra y la moción quedó rechazada.
En primer lugar, tras su aprobación inicial en el pleno del mes de diciembre, todos los grupos municipales aceptaron en esta sesión plenaria el resolver las alegaciones presentadas por la empresa encargada del servicio de recogida de residuos sólidos urbanos, dando lugar a la aprobación definitiva a la modificación del contrato. En ella, se contempla la ampliación del servicio para atender las necesidades de la Urbanización El Dique y la adaptación de este contrato a la nueva Ley de recogida selectiva que afecta a las localidades de más de 5.000 habitantes. El consistorio caspolino deberá adaptar este servicio antes de julio del 2022.
Por otro lado, otro de los principales puntos del día atendió a la aprobación de la convocatoria y las bases para la concesión de subvenciones en materia de Cultura para el ejercicio 2021, que además, ha aumentado su partida presupuestaria de los 11.500€ hasta los 20.000€. Del mismo modo, las ayudas que se pueden percibir se han incrementado hasta los 5.000 euros por entidad. Esta subvención tiene por objeto colaborar económicamente con las asociaciones, entidades culturales sin ánimo de lucro y personas físicas, que realicen proyectos cuya finalidad sea el fomento de la cultura.
La moción para instar al cese de Garzón, el mayor punto de debate
Sin duda alguna, el último punto, relativo a la moción presentada por el Partido Popular en el que se solicitaba el cese inmediato del ministro de Consumo por sus ataques a la ganadería, fue el que mayor distensión creó entre los distintos grupos municipales. «Este asunto es el que creó más debate. Incluso tuve que llamar al orden en varias ocasiones por las repetidas faltas de respeto hacia los compañeros que se estaban dando», aseguró Pilar Mustieles, la alcaldesa de Caspe.
En cuanto a la votación, tanto PSOE como CHA (quienes conforman el grupo de gobierno en Caspe) votaron en contra de la moción, mientras que PP y Ciudadanos votaron a favor de la misma. Por tanto, quedó rechazada por mayoría. «Nosotros no tenemos porque meternos en este asunto pero dejamos claro en el pleno que apoyamos la ganadería, un sector fundamental para nuestra zona. Entendemos que lo están haciendo bien. Eso sí, una cosa es apoyar la ganadería y otra pedir la dimisión, algo con lo que no estábamos de acuerdo», expresó la alcadesa.
Por su parte, desde el Partido Popular entendían como «imprescindible» la aprobación de esta moción para defender los intereses de todos los trabajadores caspolinos del sector ganadero. «Son muchos los trabajos que aporta el sector de la ganadería a Caspe, directos e indirectos. No podemos permitir que ningún ministro diga que los caspolinos trabajamos para maltratar animales ni para producir carne de mala calidad. Creemos que no se puede defender la ganadería defendiendo a este ministro, de ahí nuestra moción», aseguraron desde PP Caspe.
Más allá, desde el grupo caspolino de Ciudadanos, se posicionaron a favor de esta moción presentada por el Grupo Popular. «Al igual que el PP compartimos que esas declaraciones de Garzón no pudieron ser más desafortunadas y vimos que la moción era adecuada. El problema surgió cuando vimos que desde el equipo de gobierno (PSOE y CHA) sacaron de contexto el debate de la moción. Además, el concejal de agricultura, representante de CHA, defendió que ellos querían otro modelo de ganadería y que no están a favor de la integración. Le comentamos que nos parecía un desconocimiento absoluto del territorio y del sector», comentó Cristian Poblador, líder de Ciudadanos en Caspe.
Ante estas palabras, Rafael Guardia, concejal de agricultura y portavoz de CHA en el consistorio caspolino afirmó «no estar en contra de un modelo integrador e intensivo». «Lo único que nosotros no compartimos es que se den macro-explotaciones en las que se reduce las posibilidades de las pequeñas empresas que se dedican al sector y que afectan la calidad del producto y a la contaminación de la atmósfera», conlcuyó el concejal.