La zona básica de salud de Caspe está en el punto de mira después de que haya registrado, en tan solo tres días, un total de 35 nuevos casos de coronavirus en su población. En la mayoría de ellos, se trata de un brote acontecido en el centro de mayores Adolfo Suarez de la Ciudad del compromiso, una de las dos residencias con las que cuenta la localidad.
Según los datos oficiales de Salud Pública, se han registrado entre los días 4, 5 y 6 de diciembre un total de 35 casos, la mayoría de ellos en la última jornada la correspondiente a este domingo, 6 de diciembre, cuando se detectaron un total de 26 nuevos casos en la zona sanitaria de Caspe. En cuanto a las otras dos zonas básicas de salud de la Comarca del Bajo Aragón-Caspe, la de Maella y la de Mequinenza (a la que pertenece el término municipal de Fayón), no se ha registrado ningún caso en las últimas jornadas.
Al parecer, un residente del centro de mayores caspolino contrajo la enfermedad, por lo que el personal del centro de salud comenzó a realizar las pruebas pertinentes a todos los ancianos alojados, corroborando que había 25 positivos más en las instalaciones.
Ninguno de ellos sufre síntomas graves, e incluso varios son asintomáticos, por lo que no han tenido que ser hospitalizados y se encuentran aislados en sus habitaciones pasando la cuarentena. El resto de residentes siguen haciendo vida normal, conviviendo en las zonas comunes y con todas las medidas de protección. Efectivos de bomberos del Parque de Caspe están realizando continuos trabajos de desinfección en el lugar desde que se conoció la noticia.
La alcaldesa de Caspe, Pilar Mustieles, llama a la calma a todos los ciudadanos y asegura que el brote esta controlado dentro de las instalaciones del centro de mayores: «Se ha actuado rápido en cuanto se supo del primer contagio y está toda la situación muy controlada, sin embargo y para evitar futuros brotes llamamos a la precaución y la responsabilidad individual de nuestros vecinos».
Tendencia positiva desde septiembre
Cabe recordar que la zona básica de salud de Caspe (a la que pertenecen los vecinos de la capital de comarca y de Chiprana) lleva sin registrar datos así de alarmantes desde hace varios meses. El territorio no detectaba una cantidad similar de positivos desde comienzos del pasado mes de septiembre, cuando superó la fase 2 y pasó, después de varios meses, a la nueva normalidad.
Desde el inicio de la pandemia, en el mes de febrero, la zona sanitaria caspolina ha registrado más de 600 contagios acumulados, y una incidencia de 59 casos por cada 1.000 habitantes. Se trata de la cifra más alta con respecto al resto de zonas básicas de salud de todo el Bajo Aragón Histórico.
La zona del Bajo Aragón-Caspe ha sido una de las más preocupantes para Salud Pública desde que se inició la crisis sanitaria a comienzos del presente año. El origen del problema radicó en su momento en el gran volumen de temporeros que se trasladó a la zona para trabajar en la campaña de la fruta. Así lo confirman los expertos, quienes explican a través de varios estudios que los primeros casos se detectaron en Alcañiz y Caspe el mes de junio con motivo de la llegada de todos estos trabajadores.
Mari Carmen dice
No se puede llevar de copas a los mayores en las terrazas hace demasiado frio.