La Diputación Provincial de Teruel reabre al tráfico la carretera TE-V-3004 de La Portellada a Valderrobres después de haber reformado un tramo de poco más de 1 kilómetro. El nuevo vial sustituye al anterior tramo carretero, que presentaba varias curvas peligrosas así como un firme estrecho e irregular con un asfalto que arrastraba décadas de abandono.
Quedan sin embargo pendientes de ejecución las labores de instalación de señalización vertical, horizontal y la instalación de guarda raíles, algo que está previsto que se finalice en los próximos días. De igual modo, desde el consistorio pidieron el acondicionamiento de varios accesos a las fincas colindantes que, al parecer, no se habrían ejecutado. «Llevamos muchos años luchando por la mejora de toda la carretera. Esperamos que en esta legislatura se finalice todo el tramo», explicó Gloria Serrat, alcaldesa de La Portellada.
Debido a los trabajos de reforma y nueva construcción del nuevo tramo carretero, fue necesario cortar la vía durante varias semanas. Durante el tiempo que la carretera estuvo cerrada al tráfico los conductores de La Portellada, así como los de Ráfales y Fórnoles -que también utilizan esta vía- tuvieron que hacer el trayecto desde la localidad a Valderrobres dando un rodeo por La Fresneda.
A la espera seguirán sin embargo las carreteras de Ráfales, Fórnoles y Arens de Lledó. En muchos casos, dada la tardanza y el retraso con el que suelen llegar las reformas íntegras de este tipo de vías, muchos vecinos demandan que la administración asfaltase adecuadamente las distintas carreteras del territorio y se prescindiese de una vez por todas del denominado asfalto frío.
Teruel siempre dice
Ya era hora de que la arreglasen,