La Historia es apasionante. No solo la que se escribe con mayúsculas y está plagada de nombres grandilocuentes, de apellidos pintones. No solo la de conquistas y sublevaciones, la de guerras y ententes. Todo lo que ha llegado a nuestros días tiene un origen y un por qué que enlaza con otros hechos e historias temporales que se cruzan, tramando una telaraña interesantísima de acontecimientos interconectados. Dicho esto: ¿Y si el origen de la ginebra estuviera en el Bajo Aragón Histórico? Tratar de descubrir cómo algo surgió es unas veces más sencillo que otras, porque cuando nos remontamos a varios siglos atrás y escasea la documentación los hechos se desdibujan. Aparecen entonces la intuición, la curiosidad e incluso la imaginación como brújulas confiables y amigas.
Andrés González no imaginaba que escuchar en 2013 aquel discurso del entonces Justicia de Aragón, Fernando García Vicente, le llevaría, casi una década después, a sacar al mercado una ginebra junto a dos socios. «Presencié una conferencia de García Vicente que hablaba de la independencia de Andorra respecto al Arzobispado de Albalate, que fue en 1613. Mencionó esa economía relativa al enebro en la zona y dijo que quizás aquí ya se hacía ginebra en aquella época», cuenta González. Esa fue la semilla de un proyecto que lleva gestándose varios años, y cuyo fruto ha visto ahora la luz. Una ginebra: «Three Stupids 1613».
En 2013 González regentaba un pequeño comercio de bebidas y licores en Andorra y las palabras del Justicia empezaron a resonar en su cabeza. «Me quedé con esa frase y estuve investigando. He encontrado muchos datos que pueden ser fiables y que nos dan a entender que así ocurría, que aquí ya se hacía ginebra en esa época», relata. No obstante, todo aquel que rastree en cualquier buscador web el posible origen de la ginebra halla referencias muy alejadas de nuestro Bajo Aragón Histórico. Hasta ahora nadie había asociado el territorio con esta bebida, aunque, como señala González, hay algunos lazos comunes que vendrían a respaldar la teoría de que fue precisamente aquí donde comenzó a elaborarse esta bebida. El estudio interrelaciona la Guerra de los 80 años, el Ducado de Alba y el presumible conocimiento popular del uso del enebro y los destilados, en un primer momento con fines medicinales, por supuesto.
«La actual versión dice que la ginebra aparece durante la Guerra de Flandes (1565-1648), en Holanda. Investigando nos dimos cuenta de que quizás algunos de los militares de los tercios de Flandes que estuvieron por allí fueran de nuestra zona. Uno de los comandantes que dirigía aquellos ejércitos era el Duque de Alba y también dueño del Ducado de Híjar. La hipótesis que barajamos es que alguien de nuestra zona se llevara la fórmula, y la receta de la ginebra bajoaragonesa se quedase allí. Pero seguimos investigando…». Cuenta González que archiveros e historiadores han estado colaborando en el establecimiento de esta hipótesis.
Aceite de enebro
La cierto es que la tradición del enebro sí es constatable y fue notoria en el Bajo Aragón Histórico. «Descubrimos que desde el siglo XVIII aquí había una economía muy importante en relación a este producto», detalla. Localidades como Alcorisa, Foz Calanda, Crivillén, Alloza o Ariño contaron hace unos cuantos siglos con hornos en los que se producía el aceite esencial de enebro. Este aceite se obtiene de la destilación en seco del enebro a partir del calentamiento a altas temperaturas en hornos o espacios cerrados de raíces y tallos. En el territorio se han documentado varios de esos hornos. A pesar de que hay distintas tipologías resulta llamativo el de Alloza, tallado directamente en la roca y con petroglifos y canalillos por donde, presumiblemente, discurría el valorado producto.
Ginebra «Three Stupids»
A raíz de la investigación y la hipótesis sostenida, González se puso manos a la obra para crear una ginebra que dejara patente esa vinculación y tradición. Sergio Sanz y Joaquín Guerrero se subieron al barco junto al andorrano y buscaron los sabores que podían conformar esa ginebra soñada con alma bajoaragonesa. «Intentamos recuperar esa esencia de tradición que había aquí con el enebro. Nuestra ginebra tiene un total de 13 botánicos: la mayoría son de nuestra zona y hacen referencia a aquella época. Hay enebro, hay azafrán, algún cítrico para equilibrar, arbustos como el romero, el tomillo… y así hasta 13». Un «destilado de calidad», que busca hacerse hueco en el mercado a través de la identidad aragonesa y turolense.
A pesar de que la idea llevaba mucho tiempo desarrollándose, la pandemia retrasó notablemente la puesta en venta de este producto. Por el momento se han fabricado ya los dos primeros lotes en una destilería de Madrid. «La hacemos en un pequeño alambique de cobre de 500 litros, de los pocos que quedan ya en España. Normalmente de esa producción suelen salir unas 600 botellas, más o menos. Estos pequeños lotes no dejan de ser garantía de calidad y así queremos seguir haciéndolo. Por el momento hemos arrancado poniendo en venta unas 1.200 o 1.300 botellas. Ahí queremos estar. Produciendo poco a poco para no perder esa calidad», concluye.
Cester dice
¡Enhorabuena! Con acciones como ésta es con lo que sobrevivirá la España Vaciada. Ojalá tenga éxito y sirva de ejemplo e inspiración a otros y otras.
J. Duarte dice
Donde se pueden comprar.
francisco dice
Donde se puede comprar? Gracias
encélado dice
Muy bien, seguid así. Espero que los ecologistas pijo -progres no pongan reparos a la utilización de enebros, pero de esos me espero cualquier cosa.
Luis dice
Buenas,
Donde se puede comprar ??
Gracias.