La predicción del tiempo lo puso tan complicado, que no fue hasta el momento de tomar salida que decidieron si empezar o no. Finalmente, se dio el paso y una decena de personas respondió a la llamada para salir el domingo a recorrer en una ruta caminando seis ermitas del término municipal de Híjar. Entre el grupo de hijaranos hubo dos calandinos que se desplazaron a propósito para participar en la actividad convocada por el Centro de Estudios del Bajo Martín (CEBM) con el objetivo de mostrar y acercar el patrimonio histórico del territorio a su ciudadanía. Eso, y que la lluvia que caía el domingo a las 8.00 era muy débil, decidió al grupo a salir.
Se completó el trazado previsto para pasar por las seis ermitas incluidas en este recorrido aunque sí se modificó el paso por algún camino para evitar pisar barro. No obstante, y conocedores del interés que mostraron diferentes personas y que finalmente no acudieron debido a la inestabilidad del clima, esta ruta se volverá a repetir el próximo domingo día 10. La cita y requisitos son como los de este domingo pasado en la convocatoria inicial: a las 8.00 en la pasarela bajo el bar Papi junto a la N-232. La ruta está abierta a todo el público sin necesidad de inscripción y se aconseja llevar ropa acorde y algo de alimento y bebida. El recorrido lo componen 9 kilómetros y se estima una duración de entre dos y tres horas y, esta vez, ya sin lluvia ni amenaza de ella.
Primera excursión «positiva»
Este domingo «todo salió muy bien» y el grupo conoció de primera mano templos como San Antón. Vieron su interior, algo que no todo el mundo ha tenido la ocasión tras haberse sometido a una restauración y puesta en valor de los vestigios de la antigua sinagoga. El circuito se detiene en la ermita del Carmen que, desde lo alto del monte carmelo funciona durante el año como hospedería. Además de detenerse en Santa Bárbara, en el convento de los franciscanos y en el Santo Sepulcro, hace parada en San Miguel. Los senderistas pudieron conocer de cerca esta, que es la menos conocida. Comprobaron que solo quedan los arcos debido al paso del tiempo -y que bien merecen una consolidación- y a que hace años voló por los aires en una explosión de artefactos pirotécnicos.