Las voces del Coro Ciudad de Caspe se toman un merecido descanso veraniego, aunque con una excepción obligada para actuar en las fiestas de agosto. En la localidad no se concibe un evento sin el Coro, que comienza este descanso tras su participación en la conmemoración del Compromiso. La formación es una de las más sólidas, tanto es así que en 2023 celebrará sus 50 años, un cumpleaños que ya van preparando con el esmero y cariño que les caracteriza.
Javier Garcés París (Caspe, 1977) es la persona que está al frente de la dirección desde hace once años. «Les digo siempre que son la mejor microsociedad que puedo gestionar porque son muy agradecidos y muy comprometidos. Cualquier aventura que les lanzo se tiran a por ella y es un orgullo», dice. Combina la dirección en Caspe con la de Teselas Ensemble Vocal, un coro creado por él en otoño en el que ha reunido a coralistas de las tres provincias. También del territorio bajoaragonés, como es el caso de Beatriz Barceló, directora a su vez del Coro de la Unión Musical de Alcañiz. «Es una maravilla trabajar con ella y compartir proyectos aparte entre los coros de Alcañiz y Caspe», dice.
Teselas ya ha dado dos conciertos con la Orquesta de Cámara del Auditorio de Zaragoza Enigma dirigida por Asier Puga. Interpretaron «Oresteïa», de Iannis Xenakis, siendo la segunda vez que se hacía completa en España. Entre 2005 y 2019, Garcés dirigió todas las secciones de los coros residentes del Auditorio de Zaragoza: infantil, juvenil y adulto, y del deseo de reunir a personas con las que trabajó en esos 15 años, además de otras amistades del canto coral aragonés, nació Teselas.

Todo esto lo compagina con su trabajo de maestro y acaba de terminar un nuevo curso académico en el CPI Parque Goya de Zaragoza donde imparte clases de Música y, además, es tutor. No procede de una familia de músicos pero sí nació en una casa con inquietudes artísticas. «Mis padres me apuntaron con siete años a aprender y yo, sin saber exactamente a lo que iba, lo recuerdo como uno de los días más especiales de mi vida. Acertaron de lleno», sonríe.
Comenzó en la escuela de música de Caspe donde se formó con profesores como José Manuel Gavín y Conchita Martín, con los que empezó la especialidad de Piano. En Caspe estudió todo el grado profesional como alumno libre. Continuó con Magisterio y al acabar, cursó el grado superior en el CSMA de las especialidades de Pedagogía Musical y de Solfeo y Teoría de la Música.
Durante un par de cursos escolares fue profesor de la Cátedra de la asignatura Contrapunto y Fuga en el superior hasta que en 2005 aprobó las oposiciones de maestro y ha pasado por todos los cuerpos: en conservatorio medio, superior, secundaria y primaria. Entre 2016 y 2020 coordinó el pionero programa de Coros Escolares del Gobierno de Aragón, una iniciativa para la que hay planes de retomar tras la paralización por la pandemia pero sigue en espera. Recientemente ha desarrollado el currículum para Aragón de las asignaturas «Coro y Técnica Vocal I y II» de 1º y 2º de Bachillerato de la nueva ley de Educación LOMLOE. Todos los pasos de Garcés se pueden seguir en su Facebook y en su Instagram; también los de Teselas (Facebook e Instagram) y los del Coro Ciudad de Caspe en las suyas propias.
Colaboraciones entre artistas
«Ya lo dice el refrán, que el que canta su mal espanta», ríe. «La voz es cuerpo, instrumento y por lo tanto, medio de expresión, alcanzándose un punto catártico que une mucho a un coro. Tampoco es preciso tener conocimientos previos, convirtiéndose en una puerta musical accesible a todas las personas interesadas», añade. «Hay un proceso de aprendizaje que no se acaba nunca, y cada uno desde su punto de partida intenta siempre aportar lo mejor y se adquiere un compromiso fuerte», reflexiona.

Esta fraternidad no se limita al coro porque, tanto en Santa Cecilia como en las Blancantadas – «que ojalá vuelvan»-, siempre se rodean de más artistas. Además de las frecuentes colaboraciones con el Coro de la Unión Musical de Alcañiz, cuentan con el joven pianista Isaac Balaguer de manera estable, Marta Castelló -la Casa de Burbujas Azules- lleva la dirección escénica y han actuado con Blue Tango o con la actriz y poeta Lucía Camón; y junto al Centro de Estudios Comarcales del Bajo Aragón Caspe (CECBA) desarrollaron talleres de canto coral. «El último espectáculo de Santa Cecilia lo basamos en la obra pictórica de Feguars. Siempre intentamos involucrar a más artistas y de diferentes ámbitos para tratar de hacer más territorio y nutrirnos de lo mejor de cada una de las artes», concluye.