El Justicia de Aragón pide aumentar los efectivos de la Guardia Civil en los pueblos y reagrupar los cuarteles para que haya más agentes después de realizar un estudio en el que ha analizado la situación y los recursos destinados a la seguridad ciudadana en el ámbito rural aragonés. También destaca que las estadísticas oficiales de criminalidad, que son bajas en provincias como Teruel, están «distorsionadas» porque muchos los hechos delictivos que no se denuncian por entender que no se van a investigar o por las dificultades que supone presentar una denuncia debido a que hay cuarteles que solo abren uno o dos días a la semana.
El Lugarteniente del Justicia, Javier Hernández, ha entregado este miércoles al presidente de las Cortes, Javier Sada, el informe este miércoles en el Palacio de la Aljafería. Para el Justicia, la falta de agentes policiales se ha comprobado que afecta con carácter general a todas las administraciones, pero parece verse más agravado en la Guardia Civil, donde unas plantillas reducidas tienen que cubrir grandes zonas geográficas. Por ello se propone aumentar el número de agentes de la Guardia Civil tras los estudios, análisis y reorganización oportunos.
Destaca que actualmente es habitual encontrar puestos de la Guardia Civil cerrados por no disponer de personal para atenderlos o bien con un único agente dedicado a la protección del puesto. Con base en ello y «a pesar del rechazo que pueda existir a esta medida», el Justicia considera que sería necesario valorar la idoneidad de mantener 122 puestos de Aragón. Considera que el número de puestos unido a la falta de agentes dificulta, cuando no impide, que existan patrullas de seguridad ciudadana dedicadas a atender los servicios. «A su vez se debe valorar la eficacia y eficiencia del servicio, pues no debemos olvidar que el fin principal de la fuerza pública es garantizar la seguridad ciudadana, no el asentamiento de la población, pues para ello las administraciones pueden llevar a cabo otro tipo de medidas de estímulo», afirma el Justicia.
En Aragón se cuenta con 36 efectivos de los grupos Roca aunque no son puestos de nueva creación sino que se detraen de las patrullas de seguridad ciudadana. Por lo que para poder afrontar de una manera óptima las funciones encomendadas el Justicia considera que estas plazas deben ser de nueva creación y no ser detraídas de sus unidades de origen.
Otra cuestión que analiza el informe es que en Aragón contamos con pocos Cuerpos de Policía Local y a su vez con un reducido número de efectivos, lo cual dificulta la prestación del servicio en turnos de 24 horas. Como medida para paliar dicha problemática, el Justicia propone el estimular la agrupación de municipios limítrofes para la prestación del servicio de Policía Local. De este modo se obtendría una mayor presencia policial en los municipios agrupados que pudiera llegar a cubrir los turnos completos.
«La falta temporal de efectivos en las plazas de Policía Local como consecuencia de la renuncia a las mismas es uno de los principales problemas que nos han trasladado desde los Ayuntamientos. Por ello se propone como medida de carácter temporal y extraordinaria el promover la figura del interno y la comisión de servicios para atender circunstancias puntuales y extraordinarias», apuntan.
Por otro lado, el Justicia considera que la dificultad para la cobertura de plazas tras finalizar los procesos selectivos es otra de las problemáticas trasladadas a esta Institución. Para ello se propone que los procesos selectivos de los ayuntamientos se lleven a cabo mediante la convocatoria única, de este modo se reduciría notablemente el abandono de las plazas. Además, apunta que la Dirección General de Interior y Protección Civil tiene entre sus cometidos la coordinación de las policías locales, si bien, hasta la fecha no se ha llevado a cabo una apuesta decidida por un modelo policial para Aragón, lo que sin duda supone un esfuerzo adicional de dicha Dirección. Por ello sería necesaria una dotación adecuada y dimensionada al reto que se le propone.