Los tambores de Alcañiz pusieron el broche final al acto tocando con maestría | Adrián Monserrate
El pregonero hizo hincapié en el origen religioso de la festividad incorporando vivencias personales
Alcañiz se sumergió oficialmente en la Semana Santa este lunes tras la lectura del pregón. En esta ocasión el honor recayó en el párroco alcañizano Manuel Anglés, secretario general de la Orden de la Virgen de la Merced que en 2016 fue trasladado a Roma para desempeñar sus labores. El teatro, abarrotado y expectante, asistió a un texto eminentemente religioso en el que su autor pasó de puntillas por la vinculación popular para poner el foco en el origen bíblico de esta festividad. El acto estuvo presidido por las autoridades y contó con representación de la Junta Suprema y de las cofradías alcañizanas, ya inmersas en los últimos preparativos antes de salir a las calles. El público respondió, deseoso de que lleguen los días grandes y las procesiones más representativas recorran Alcañiz.
El pregonero apeló a dos pilares fundamentales de la Semana Santa alcañizana: identidad cristiana y unión, ejemplificada en las cofradías y hermandades que procesionan estos días. «Vivir como hermanos es una tarea que dura toda la vida y vivir en cofradía es querer vivir esta comunión», expresó, poco antes de hacer referencia a la identificación mutua de todos los alcañizanos con los momentos cumbre de la Semana Santa, como el sonido de los tambores o la solemne retirada de los pasos en las procesiones.

En este sentido se preguntó por qué se toca el tambor o por qué los portantes cargan con el peso de las peanas, haciendo referencia a la confraternización en torno a la figura de Jesús. «Tienes una identidad. Vives con otros llenos de los mismos sentimientos que a ti te embargan y has sido salvado y redimido por la Pascua del Señor», dijo.
El reconocimiento del toque por la Unesco como Patrimonio Inmaterial de la Humanidad sirvió para abrir el pregón. Manuel Anglés puso en valor tal nombramiento e incidió en que supone un «fuerte compromiso hacia el futuro» para recordar que «las manifestaciones culturales de todos los pueblos son dignas de valorar, de preservar y, si cabe, de mejorar». Posteriormente, Anglés se refirió al origen ancestral de la Pascua desde su pasado judío y a la importancia de vivir la vida como Jesús lo hizo camino de la cruz: con pasión.

Recuerdos y vivencias personales
Tampoco faltaron alusiones al estruendo de los tambores como forma de honrar a Jesucristo. «Es toque de duelo y de dolor, de pasión y de entrega porque sigue latiendo el corazón de Cristo crucificado», explicó. Asimismo, Anglés recordó su antiguo tambor de la infancia con el que recorrió las calles de Alcañiz un Viernes Santo en la procesión del Pregón. «A pesar de salir solo una vez, ese tambor con su caja de latón y con su piel sigue resonando en mí», dijo emocionado.
Sobre la Semana Santa como tal rememoró el comentario que una persona le hizo viendo vídeos de procesiones en Alcañiz, en el que parecía no haber público en las calles. «No es una representación para mirar, sino que es una forma de ser y de vivir», subrayó el pregonero orgulloso. Manuel Anglés también realizó un recorrido día a día por la Semana Santa alcañizana en el que repasó lo más destacado de cada jornada, uniendo vivencias personales y pasajes bíblicos.

Los tambores de Alcañiz, que aguardan para salir en masa a las calles, sonaron en el teatro para cerrar el acto. Un grupo de tamborileros redobló con maestría para terminar despertando la ovación del respetable. La Semana Santa ya está aquí y, si el tiempo lo permite, volverá a lucir en todo su esplendor.
- Imagen de archivo. Pregón de la Semana Santa en Alcañiz 2019.
- El acto de lectura del pregón estuvo presidido por las autoridades y contó con representación de todas las cofradías alcañizanas | Adrián Monserrate
- Los tambores de Alcañiz sonaron tras la lectura del pregón | Adrián Monserrate
- El teatro estuvo abarrotado de público para presenciar el pregón | Adrián Monserrate
- Manuel Anglés firmó en el Libro de Honor de Alcañiz minutos antes del pregón | Adrián Monserrate
- Imagen lateral de las autoridades y los tambores, en la parte final del acto | Adrián Monserrate