Hace algo más de un año, las poblaciones que componen la actual comarca del Bajo Aragón Caspe/Baix Aragó Casp (Caspe, Fabara, Chiprana, Nonaspe, Fayón), nos pusimos en pie de guerra ya que la empresa semiestatal de la red de transportes de viajeros por ferrocarril, tenía previsto suprimir 4 líneas de transporte, más concretamente las primeras y las últimas del día  por un servicio discrecional de carretera, también llamado autobuses.

Aún sabiendo que el servicio del tren es mucho más costoso, éramos conscientes que este servicio, amén de ser un servicio público, supera en calidad al del autocar por espacio, servicio y comodidad. Por estas razones no podíamos perderlo. Durante esas fechas, nos tocó aguantar muchas acusaciones que en algunos casos no eran ciertas, ya que se achacaba esta supresión a la Consejería de Vertebración y más concretamente a su dirección general de Movilidad. Nada más lejos de la realidad, ya que las competencias eran del gobierno central al tratarse de una línea Inter autonómica.

A pesar de las críticas que recibíamos los representantes locales de CHA Caspe, nos sumamos en la lucha por mantener este servicio junto a los cientos de comarcanos que se movilizaron, tuvimos reuniones tensas y ejercimos presiones hasta el extremos, pero al final imperó el sentido común y, tanto gracias a la Consejería de Vertebración como a nuestros representantes locales, consiguieron mantener el servicio  y recuperarlo, ya que desde la pandemia habían dejado de prestarlo.

Aún seguimos revindicando temas parciales sobre la estación de Caspe como: unos baños dignos, una estación limpia, que sea accesible para todas las personas que tengan cualquier tipo de discapacidad y que esté dotada con personal laboral fijo. Estas ultimas reivindicaciones están siendo más complicadas ya que volvemos a tratar con el tema de las competencias estatales y, si nuestros representantes que están en Madrid no se mueven, no tenemos nada que hacer, pero nosotros seguimos ahí y no dejamos de instar para que se hagan realidad.

En el pasado año también se actuó en la carretera A-230 antigua, que une Caspe con el Poblado llamado El Dique y con Bujaraloz, una carretera muy utilizada por los residentes de dicho poblado. Se han invertido 156.101€. Todo gracias a la predisposición de la Dirección General de carreteras para adecuarla ante a la insistencia del consistorio para su ejecución.

También hay que dar otra muy buena noticia, y es que, por fin, la vieja reivindicación de eliminar las curvas de Valdestrecha va a ser una realidad. La carreta A-230 Caspe-Sariñena. Esta carretera está incluida en el Plan Extraordinario de Carreteras con una inversión de 6 millones de euros. Las obras se van a licitar este año y su ejecución empezará a principios del año que viene. Sabemos que hay muchos escépticos que hasta que no vean las obras, no se lo van a creer (y les entendemos) pero debemos decir que con insistencia, muchas reuniones y mucho tesón, el trabajo da sus frutos.

Y hablando de trabajo, quiero hacer una mención especial a mi compañero Rafa Lumbreras por el trabajo realizado para que las Fiestas del Compromiso hayan sido unas fiestas ejemplares. Le ha costado mucho esfuerzo, muchas horas invertidas y muchos quebraderos de cabeza, pero hay que decir que han sido un éxito y, a pesar de estar convaleciente, ya nos tiene preparado un ciclo cultural para el mes de Julio. Esta es la política CHA Caspe, el trabajo.

Rafael Guardia. CHA Caspe