Con todos los especialistas que existen en materia lingüística en este país y en todo el mundo hispanoparlante al parecer, es Toni Cantó el ser más capacitado para dirigir la nueva mamandurria de la señora Ayuso, la Oficina del Español.

Dicen que el objetivo de la misma es convertir a Madrid en la capital del español en Europa, gracias por tan loable labor, hasta ahora no teníamos claro si la capital del español en Europa era Londres o era Berlín, pero está muy bien que tengan que montar un chiringuito en la capital del único país de Europa en el que el español es el idioma oficial para recordarnos eso, que Madrid es capital. Nos va a costar un poco caro confirmar la evidencia, Toni Cantó unos 74.000 euros al año, supongo que no estará solo y que deberemos sumar, más trabajadores, instalaciones, recursos…

No es algo puntual, es sintomático de un sistema donde abundan las colocaciones indecentes con gruesos sueldos en todos los partidos habidos y por haber. El idioma nuestro, lo amenazan más que nadie los políticos exacerbados como Cantó, o algunas invenciones como las de Irene Montero, que se sigue reafirmando con increíble tozudez en rebuscar formas de lenguaje que encajen con sus pensamientos, bonito ejercicio imaginativo con un resultado horroroso.

Y todo este tipo de noticias que siguen abundando, se entrelazan en paralelo con otras como las de las pérdidas de trenes de Aragón, los mismos que ejecutan la sentencia tienen el valor de hablar de déficit en un servicio público, de decir que defienden el medio rural y que la culpa no es de nadie, ni de Soro, ni Lambán, ni de Ábalos, que todos defienden la España rural desposeyéndola de servicios. Claro que es deficitario y más deficitario será todo mientras vayan quitando más cosas y mientras sigan gastando dinero en oficinas de la evidencia, en sueldos abultados y no gasten sus energías en sumar y no restar, en multiplicar y no dividir. Si todo esto lo sabemos ya, no hay ninguna zona de España que vaya a ir hacia arriba quitando lo poco que tienen.

Tampoco deja de resultar curioso que nos digan que Europa se pone exigente para repartir el dinero y de manera simbólica nos encontramos cosas como lo de Cantó, los hay que disfrutan engañándonos lo tengo claro.

Yo diría que si se quiere defender el medio rural, primero de todo son acciones y no palabras. Me imagino que Teruel lo que necesitaba no es que le quiten el tren, es que ese tren se hubiera modernizado y en lugar de tardar dos horas y media, tardase una hora menos, a lo mejor eso ayuda a que más gente se anime a cogerlo, valencianos a pasar el fin de semana a Teruel, a disfrutar de las cosas a visitar o de la gastronomía, por ejemplo. Pero ya digo que no lo sé e igual los secundarios de este cuento que somos la mayoría no sabemos nada y la razón la tienen los que van cerrando servicios o los de la Oficina del Español en España.

Víctor Puch. Sal en la herida