Desde el punto de vista científico, este concepto se basa en el cuarto principio o cuarta ley de la termodinámica, que es el postulado del economista rumano Nicholas Georgescu-Roegen, que afirma que la materia disponible se degrada de forma continua e irreversible en materia no disponible de forma práctica. Es una modificación del segundo principio de la termodinámica, pero aplicándolo a la materia, en vez de a la energía. El decrecimiento es un término utilizado tanto para un movimiento político, económico y social como para un conjunto de teorías que critican el paradigma del crecimiento económico. Se basa en ideas de una amplia gama de líneas de pensamiento como la ecología política, la economía ecológica, la ecología política feminista y la justicia ambiental, señalando el daño social y ecológico causado por la búsqueda del crecimiento infinito y los imperativos occidentales de «desarrollo». El decrecimiento enfatiza la necesidad de reducir el consumo y la producción global (metabolismo social) y aboga por una sociedad socialmente justa y ecológicamente sostenible en la que el bienestar social y ambiental reemplace al PIB como indicador de prosperidad. Por lo tanto, aunque es probable que el PIB se reduzca en una «sociedad del decrecimiento», es decir, una sociedad en la que se logran los objetivos del movimiento del decrecimiento, este no es el objetivo principal del decrecimiento.
El decrecimiento resalta la importancia de la autonomía, el trabajo de cuidado, la autoorganización, los bienes comunes, la comunidad, el localismo abierto, el trabajo colaborativo, la felicidad y la convivencia. La conservación del medio ambiente, afirman, no es posible sin reducir la producción económica que sería la responsable de la reducción de los recursos naturales y la destrucción del medio que genera, que actualmente estaría por encima de la capacidad de regeneración natural del planeta. Además, también cuestiona la capacidad del modelo de vida moderno para producir bienestar. Por estas causas se oponen al desarrollo sostenible. El reto estaría en vivir mejor con menos. Los partidarios del decrecimiento proponen una disminución del consumo y la producción controlada y racional, permitiendo respetar el clima, los ecosistemas y los propios seres humanos. Esta transición se realizaría mediante la aplicación de principios más adecuados a una situación de recursos limitados: escala reducida, relocalización, eficiencia, cooperación, autoproducción (e intercambio), durabilidad y sobriedad. En definitiva, y tomando asimismo como base la simplicidad voluntaria, buscan reconsiderar los conceptos de poder adquisitivo y nivel de vida. De no actuar razonadamente, opinan generalmente que se llegaría a una situación de decrecimiento forzado debido a esa falta de recursos: «y si no decrecemos, en virtud de un proyecto racional, mesurado y consciente, acabaremos por decrecer de resultas del hundimiento sin fondo del capitalismo global». Sus defensores argumentan que no se debe pensar en el concepto como algo negativo, sino muy al contrario: «cuando un río se desborda, todos deseamos que decrezca para que las aguas vuelvan a su cauce».
A pesar de la simpatía con que se pueden aceptar estas teorías del decrecimiento, conviene resaltar dos aspectos: El aumento de la producción, «aunque sea obtenido mediante un desarrollo sostenible», no tiene por causa solamente el crecimiento económico, sino muy especialmente el crecimiento de la población. Millones de personas en todo el mundo, desean adquirir niveles de bienestar del que todavía no gozan. Mientras esto ocurra, la producción tendrá que acompañar a las necesidades de los menos favorecidos. Otro punto en conflicto es que la realidad nos ha enseñado que menos producción equivale a escasez, y que en esa situación el coste de los productos aumenta, y la desigualdad crece. Y esto ocurre, aunque el poder limite el acceso a los bienes mediante las llamadas Cartillas de Racionamiento. (Llámense como se llamen). Mi recomendación y mi esperanza es que la generosidad y la responsabilidad de los humanos, consiga que cada persona y cada empresa trabaje éticamente para transformar la realidad en la dirección correcta, empezando por la transmutación de cada uno de nosotros de consumidores a personas que comparten su bienestar.
No me cabe duda de que esta será la tarea de los próximos años, y que dirigirán el trabajo los que sean verdaderos líderes. No estoy seguro si los lideres nacen o se hacen. Parece que los dones naturales de ciertas personas los llevan a ser lideres, pero su voluntad quizás es la de no serlos. En cambio, hay personas de voluntad extraordinaria que quizás no han recibido naturalmente los dones necesarios, pero que se esfuerzan en alcanzar esos dones mediante la superación y el estudio
Antonio Germán Torres. Cierzo y bochorno
Álvaro dice
Su artículo, don Antonio, es para publicarlo más bien en una revista científica, no -pienso yo-, en un periódico. Ha demostrado con él ante los demás que usted sabe mucho (o ha copiado un tanto), que es lo que, en síntesis, usted buscaba, le gusta a usted siempre destacar sobre los demás.
antoniogermantorres.- dice
Lamento haberle producido esa impresión. La verdad es que en La Comarca últimamente varios comentaristas habían expresado distintas opiniones sobre lo que conviene hacer, una de ellas el decrecimiento. Pero tomo nota. Gracias por su observación.
Jose Luis del Valle-Iturriaga dice
Buen articulo. Como partidario del decrecimiento, sólo aporto que es impensable que se llegue a él por una decisión política, pues la ambición de votos se rinde ante los postulados del crecimiento económico. Yo abogo por las decisiones individuales, dejar de consumir lo superfluo y valorar los productos … Reciclar, reutilizar, etc.. No es reducir la oferta, sino la demanda, y así, de paso, bajarían los precios.
Miguel Angel dice
crecimiento , decrecimiento , PIB ?? que es el PIB ..¿¿ crecimiento sostenible , estado de bienestar ,
yo lo dejaria casi todo en consumir en crecer con SENTIDO COMUN .en satifacerse con SENTIDO COMUN
saludos
Ramón del Guinardó dice
Todo lo que repercute en la economia, fabricación produción compras a la desesperada gasto a tuti pleni, o te lo miras dos veces antes de comprar o ha endeudarte tocan.
Tanto en el plano macro economico como en el domestico .
Dicho esto, yo no tengo argumentos para comentar el articulo del Sr German Torres, un articulo muy bien escrito y muy tecnico, por lo cual dare mi opinion al tema, opinion al pie de calle…y un recordatorio.
– Mi opinion : es que no gastes mas de lo que puedas.
– Recordatorio : España tiene una deuda que no la podra pagar nunca.
Conclusión : o PIB o…
Ahi lo dejo.
Saludos.
Miguel Angel dice
en la crisis del 2007 era preocupante la deuda del ESTADO . pero era mas preocupante la deuda por
UNIDAD FAMILIAR . La economia se fue moderadamente recuperando ?? cuando ??? cuando DECRECIO
la deuda por UNIDAD FAMILIAR . Y a partir de ahi . el papa estado , los estados , los sectores financieros
volvieron a respirar , se dieron cuenta , que nos habian metido el dinero por los ojos , todo eran facilidades
hasta que la cosa se torcio . economia y unidad familiar dicese sentido comun en el gastar
un saludo
Utopia dice
En un intercambio de opiniones, le recomendé que se informase un poco sobre las teorías del Decrecimiento.
No me imaginaba que nos iba a hacer un artículo de opinión sobre el tema…