El pasado martes, 4 de mayo, en el Pleno Ordinario se reconoció y acordó por unanimidad el pago de la famosa deuda que el Ayuntamiento de Alcañiz tiene con Aquara, 5 años después de lo que debería haber sido, puesto que la sentencia del Tribunal Superior de Justicia de Aragón (declarando ilegal la prórroga con Aquagest por 25 años a cambio 2,3 millones de euros por el adelanto del canon) se produjo en mayo de 2016 y la devolución se debería haber realizado en los tres meses posteriores. Este acuerdo tomado por unanimidad da la sensación de ser un tema de consenso, pero en realidad tengo mucho que decir y explicar.

En primer lugar sorprende (y mucho) que se reconozca la deuda por algunas personas que han estado gobernando durante las dos últimas legislaturas y que han estado defendido durante ocho años que esta deuda no existía. Hasta el año pasado no aparecía en las cuentas del Ayuntamiento estos 2,3 millones de euros que nos habían prestado. Y no será porque no lo hubiéramos reclamado. Recuerdo perfectamente las broncas que teníamos en las comisiones de Hacienda con el anterior equipo de gobierno por no reconocer esta deuda. Siempre lo hemos defendido y el tiempo nos ha dado la razón porque ya la sentencia en primera instancia recogía claras manifestaciones que hacían evidente que era una operación de endeudamiento. Imagino que no interesaba que aparecieran estos 2,3 millones de euros porque entonces todas esas cuentas tan bonitas que nos vendía el PP, sobre la reducción de la deuda, se habrían esfumado.

En segundo lugar no quiero olvidarme de la otra parte (no inocente) que participó en esa operación: la empresa. Ahora le vamos a devolver hasta el último euro que nos prestó (sin los intereses que nos pretendía cobrar) pero por culpa de inacción del PP durante la pasada legislatura, esta empresa se va a llevar los beneficios generados por su actividad durante los últimos 4 años sin haber tenido que concursar en ningún concurso público. Quizás sea por eso por lo que no pidieron, desde la empresa, la devolución de la deuda mientras gobernó el PP. ¿Pero saben además qué ponía en los pliegos del contrato de agua que estaba preparando el Partido Popular durante la pasada legislatura? Que la empresa que ganara el concurso tenía que pagar un canon inicial de 2,3 millones de euros (blanco y en botella… yo no creo que las casualidades).

Y en tercer lugar decir que ha merecido la pena todo este esfuerzo porque las alcañizanas y alcañizanos se van a ahorrar casi 3 millones de euros de los intereses que hubiéramos pagado a la empresa concesionaria del agua por la devolución de los 2,3 millones de euros a 25 años con un interés de más del 6% (interés de bono basura). Ha costado, pero mereció la pena.

María Milián – IU Alcañiz