A pesar de los incumplimientos de acuerdos, de las mentiras, de las traiciones con que el Gobierno ha pagado el apoyo de Ciudadanos a los estados de alarma, seguimos con la mano tendida en la negociación de los presupuestos porque no es hora de contar agravios, ¡ni votos!, sino de centrarse en las personas que están sufriendo la enfermedad o la muerte de sus seres queridos, la pérdida de su empleo o la ruina del pequeño negocio que tanto esfuerzo les costó levantar. Seguimos con la mano tendida, a pesar de todo, porque nuestro objetivo es proteger su salud, su empleo y su futuro.

Seguimos con la mano tendida, pero no pedimos vicepresidencias, ni la exclusión del español como lengua vehicular, ni más financiación e infraestructuras para unos territorios sobre otros, ni medidas de gracia para políticos presos ni, por supuesto, para asesinos. Lo ponemos más fácil, solo pedimos que no haya subidas de impuestos que lastren a las familias, a los autónomos y al mantenimiento y creación de empleo, que no se grave el diesel, que se ayude a miles de pequeñas empresas a las que esta crisis está arruinando, que no se aproveche una Ley de Educación, sin consenso -¡otra!-, para arrinconar la lengua común,…

Señala Luis Miller, que las diferencias entre los votantes de los distintos partidos sobre políticas de impuestos, inmigración o sanidad son mucho más pequeñas que las diferencias identitarias basadas en cuestiones territoriales o de identificación con un determinado bloque «rojo» o «azul». Por ello, a pesar del desprecio y de los ataques de los extremos, seguimos con la mano tendida en la negociación de los presupuestos para que el Gobierno tenga una alternativa cuya elección permita abrir una grieta en esa polarización identitaria y afectiva, causa del bloqueo institucional.
La mano está tendida pero, antes de elegir, recordad las palabras de Pilar Ruiz, madre del socialista Joseba Pagazaurtundua, asesinado por ETA, «La defensa de la vida y de la libertad y de la dignidad es más importante que el poder o que el interés del Partido Socialista».

Hemos perdido muchas cosas; ¡salvemos nuestra convivencia!

Luis Esteban – CIUDADANOS Calanda