A un par de semanas de empezar el curso escolar, el cómo sigue siendo una incógnita.
La intención inicial parece que sea de modo presencial, lo que suscita muchas dudas sobre las condiciones de cómo hacerlo, pero la información que se trasmite por el momento, es prácticamente nula.

No es una decisión fácil, por varios motivos, el primero la seguridad sanitaria de nuestros entornos familiares, ya que juntar todos los dias a todos nuestros hijos y luego que vuelvan a casa, no parece ser la forma más segura de evitar los contagios por covid, máxime cuando todos conocemos la forma de actuar de los niños, que como es normal, juegan, se abrazan, comparten bocadillo, etc. Otra parte difícil de la decisión es el nivel académico de nuestros hijos, ya que si ideamos nuevas formas de desarrollar la actividad escolar de los niños, debemos estar seguros de la eficacia de la misma, ya que, si sumamos un año poco productivo a otro año que se tuvo que acabar como buenamente se pudo, su desarrollo académico se puede ver seriamente afectado. El primer año fue normal actuar así y es de agradecer los esfuerzos de la comunidad educativa para que los niños acabaran el curso de buena manera, pero este curso ya no nos pilla de sorpresa y hemos tenido tiempo para planificar el nuevo curso escolar con los inconvenientes que tenemos.
Lo que se percibe desde las familias es mucha desinformación e incertidumbre, y aún sabiendo que estamos en un panorama complicado, creemos que ha habido tiempo para planificar algo tan importante como la educación de nuestros hijos, un nuevo sistema educativo que garantice tanto la seguridad de los entornos familiares como el desarrollo académico de los niños.

Entendemos que puedan surgir complicaciones que lleven a modificar planteamientos iniciales porque no podemos saber la evolución futura de la pandemia, pero se han tenido varios meses para diseñar una planificación del nuevo curso, para dotar más instalaciones, más personal o plantear las alternativas que se hayan decidido.

Si bien en los cursos normales todos sabiamos como actuar, ahora entendemos que se debería informar a las familias cuanto antes de la forma en que se va a proceder, ya que todos nos tenemos que organizar en caso de verse alterados los horarios habituales y no se puede hacer de la noche a la mañana.

Espero que en los próximos dias se resuelva la incógnita y se nos haga llegar la organización del curso, más que por nuestro bien, por el de nuestros hijos.

Antonio Pérez – PAR Alcorisa