No era algo inesperado, ni una sorpresa, ni algo para lo que no estábamos preparados. Cuando hago estas afirmaciones, no estoy hablando de la crisis sanitaria generada por el coronavirus, sino que hago referencia a la posterior crisis económica, social y laboral que se iba a producir después de la crisis sanitaria y que estamos empezando a palpar en nuestro entorno. Una crisis social, económica y laboral que todos, con mayor o menor certidumbre, sabíamos de su inminente llegada y para la cual, el Gobierno de España como el Gobierno de Aragón han tenido tiempo más que suficiente a lo largo de los últimos tres meses para preparar un paquete de medidas que nos ayudara a mitigar esta situación. Desde el 14 de marzo, día que se decreto el estado de alarma, se sabía que muchos autónomos perderían el 100% de sus ingresos y que entre los sectores que iban a sufrir con especial crudeza esta crisis se encontraban el sector del comercio, de la hostelería y del turismo. Establecimientos que han estado cerrados durante más de dos meses, que a día de hoy muchos aun no pueden abrir al 100% y otros que han decidido no abrir porque les supone más pérdidas abrir en estas condiciones que mantenerlos cerrados. Y ante esta situación, ¿cuáles han sido las medidas adoptadas por el Gobierno de Aragón para salvar estos sectores? Ninguna. Planes, planes y más planes, mientras las ayudas siguen sin llegar a estos sectores. Desde el Partido Popular hemos propuesto al Gobierno de Aragón sacar una línea de ayudas directas para el sector del comercio, de la hostelería y del turismo con el fin de ayudarles a pagar los gastos fijos (alquiler, agua o luz) durante los días que les obligaron a cerrar sus establecimientos, a día de hoy no han sacado ninguna línea de ayuda en este sentido se espera. También hemos propuesto convocar una línea de ayudas para ayudar a los establecimientos comerciales, turísticos y de la hostelería a sufragar los gastos ocasionados por adaptar sus establecimientos a los protocolos de seguridad que exigía el ministerio, tres meses después no han convocado dichas ayudas ni se espera que las convoquen, e incluso les instamos a que elaboraran un Plan de Promoción Turística para promocionar a Aragón como un destino de interior seguro ¿Alguien ha visto algo de esta campaña? Mientras se siguen anulando las reservas para pasar unos días por nuestro territorio. Y ante esta situación ¿qué va a pasar con nuestro pequeño comercio? donde íbamos a comprar a nuestra tienda preferida, ¿qué va a pasar con nuestras agencias de viaje? donde nos atendían con todo su cariño para prepararnos las mejores vacaciones, ¿qué va a pasar con nuestros establecimientos hoteleros y casas rurales que acogen cada años miles de turistas con su simpatía?, ¿qué va a pasar con nuestros restaurantes donde los comensales podían disfrutar de los productos típicos de nuestra tierra?, o ¿qué va a pasar con nuestros bares, lugar de encuentro y de diversión?

¿Por qué este Gobierno de Aragón no quiere ayudar a unos sectores tan importantes para nuestra economía y que generan un gran número de empleos y riqueza para el territorio? Son personas, familias, jóvenes emprendedores que viven de sus negocios, no pertenecen a ninguna elite, pertenecen a las clases medias y muchos de ellos han puesto en juego su patrimonio para sacar adelante su negocio. Ellos siempre han cumplido con sus obligaciones con el Gobierno autonómico, tienen sus licencias de actividad, pagan sus impuestos, etc. ¿Porque ahora que el Gobierno de Aragón debe cumplir con todos ellos ayudándoles a salir de esta situación los dejan de lado?

Cierto es que la izquierda nunca ha mostrado la más mínima sensibilidad con estos sectores, solo hay que ver sus políticas impositivas para ver que la gente que tiene un negocio es carne de cañón ante un gobierno de izquierdas.

Pero quizá lo que más preocupa es que, si con unos gobiernos de izquierda que presumen de sus políticas sociales y sanitarias, no con más presupuesto, sino movilizando cada vez que pueden sus plataformas en defensa de la sanidad pública gracias a la inestimable colaboración de sus acólitos han convertido a Aragón en la Comunidad Autónoma que contabiliza más fallecidos en residencias por covid-19 de toda España y han paralizado hasta en dos ocasiones las obras del hospital de Alcañiz y por primera vez han paralizado también las obras del hospital de Teruel.

¿Qué futuro le espera le espera al comercio, al turismo y la hostelería en esta provincia? ¿Una nueva subida de impuestos?

Juan Carlos Gracia – Diputado PP en las Cortes de Aragón