Este año no iba a escribir nada sobre el 8 de marzo y las reivindicaciones que hay detrás del Día Internacional de la Mujer, Con esto de que «es el año de las mujeres», que el feminismo está calando en la sociedad», «que los avances en igualdad son imparables»,… me había relajado, al ser una jornada diferente a la de los dos últimos años y no haber convocada una Huelga General, me había relajado, lo reconozco.

Y esta tarde, cuando me tomaba un café y hablaba con una amiga de una de las actividades que habían organizado en conmemoración del 8M, y un señor se ha entrometido en nuestra conversación, reprochándonos,… que ya estamos como todos años con el Día de la Mujer, que no entendía ¿qué mas queríamos? y qué a ver cuando celebrábamos el Día del Hombre, me HE DESPERTADO.

Si, de repente, me he visto teniendo que explicarle, a un desconocido, que todavía quedan muchas desigualdades hacia las mujeres, que la precariedad laboral no ha desaparecido, que en enero de este mismo año las mujeres paradas suponen el 59% del total, que mas del 72% del trabajo parcial lo seguimos desempeñando las mujeres, que la tasa de temporalidad de las mujeres es del 28%, que existe una brecha salarial de casi 6000 euros anuales, que una de cada cinco mujeres tiene ingresos inferiores al SMI; que son imprescindibles políticas de corresponsabilidad y una redistribución de los cuidados, porque de cada 10 excedencias por cuidado de menores 9 han sido solicitadas por mujeres, porque todavía las mujeres seguimos dedicando casi el doble del tiempo que los hombres a las actividades del hogar; que son necesarias medidas correctoras sobre la protección social, porque los datos reflejan que la cruda realidad es, que de las pensiones contributivas, solo el 38,7% son percibidas por mujeres, mientras que de las pensiones no contributivas 7 de cada 10 mujeres son las beneficiarias. Y todo esto por no hablar de que es imprescindible erradicar de una forma contundente, todas y cada una de las manifestaciones de violencia contra las mujeres, porque este año ya han sido asesinadas 14 mujeres, y esta terrible violencia que se ejerce contra las mujeres, por el simple echo de serlo, tiene que ser atajada desde la raíz.

Así, que sí, es necesario seguir trabajando por la igualdad y la eliminación de cualquier discriminación entre mujeres y hombres todos los días del año. No podemos relajarnos ningún día, porque se vayan produciendo avances, porque no debemos olvidar que la mayoría de ellos que han conseguido gracias a la lucha feminista.

Y en especial no podemos relajarnos el 8 de marzo, Día Internacional de la Mujer, sí de la MUJER, porque las mujeres seguimos sufriendo discriminaciones, con raíces estructurales, que debemos derribar, para construir un nuevo modelo social en el que la igualdad entre hombres y mujeres sea real y efectiva.

Así que NO OS RELAJEIS, no penséis que todo esta conseguido y no es necesaria la movilización, este 8 de marzo tenemos que volver a teñir de morado las calles de Teruel, reivindicando igualdad real y efectiva, reclamando los derechos que nos corresponden y luchando por una sociedad justa en la que ser hombre o mujer no condicione nuestra vida.

Nos vemos en la manifestación, porque todavía queda mucho por lo que luchar.

Beatriz Redón – Portavoz de la Coordinadora de Organizaciones Feministas de Teruel