Hay un refrán antiguo y certero que dice: «No es más burro el que rebuzna que el que desprecia el saber; es más burro quien pudiendo no se ocupa en aprender».

Existe un gran abanico de itinerarios flexibles y posibilidades de aprendizajes para todas las edades y niveles y muchos de ellos son gratuitos. Se puede pedir información asociaciones, comarcas, ayuntamientos, colegios, asistentes sociales, etc. El Estado debe ser garante de la educación de todos los españoles.

Después de las vacaciones, con el comienzo del curso todos tenemos una gran lista de propósitos o cambios:

-Quitarme esos kilitos de más de este verano.
-Manejarme mejor en el empleo de las nuevas tecnologías.
-Expresarme correctamente en ese idioma que tanto preciso.
-Ilusionarme con el mundo de las manualidades.
-Invertir en hábitos saludables.
-Desarrollar mi capacidad de expresión a través de la danza, baile o la música.
-Ilustrarme con libros, pergaminos o archivos.
-Divertirme practicando el deporte que me apasiona.
-Prepararme para alcanzar el éxito que me propongo.
-Rebajar el estrés tirándome por la Tirolina adaptada más grande del Mundo.

¡No te retraigas! ¡Atrévete ya!

Los objetivos se alcanzan mediante la acción y clarificando su ejecución. Saber y no actuar, es lo mismo que no saber. Debemos establecer un plan de ejercicios de voluntad, poco a poco, pero con absoluta constancia, a corto plazo y revisable. La perseverancia es una mezcla de fortaleza y paciencia y es el factor aglutinante de todos los pequeños esfuerzos realizados uno tras otro para el camino hacia la meta.

De aquí a un año desearías haber empezado hoy. Aprendamos todos a dialogar, a hablar (alusión especial a los representantes del pueblo en el Congreso) y no tanto a rebuznar, respetando las opiniones ajenas, algo tan esencial para la convivencia humana.

Y… cuando todo parezca ir en tu contra, recuerda que el avión despega en contra del viento.

Carmen Agud – PAR Fuentespalda