La lógica nos dice que a la hora de valorar un acuerdo es necesario conocer la posición de partida de cada una de las partes y cuál es la posición de éstas al llegar a la firma. La distancia entre los postulados iniciales y lo firmado finalmente será lo que marcará el éxito o fracaso de las negociaciones. No debemos caer en eso, tan actual, de ver cada negociación como una batalla entre las partes donde el éxito o fracaso de la misma estriba en que debe haber un vencedor y un vencido.

He tenido la suerte de participar en el proceso de negociación entre el PSOE y la agrupación de electores Teruel Existe. Negociación que terminó con la firma de un acuerdo de investidura que propició, junto con el voto afirmativo de otros 166 diputados, que tengamos desde el pasado martes 7 de enero Presidente del Gobierno y, pronto un nuevo gobierno que empiece a legislar.

Ha sido una valiosa experiencia formar parte del comité negociador, la cual me lleva a concluir que: para poder valorar lo conseguido en esta negociación, además de conocer los puntos de partida de las dos partes es necesario conocer la situación, administrativa real, en la que se encontraban las infraestructuras que demandamos y que para nosotros eran irrenunciables.

De manera que puedo asegurar que la mayoría, por no decir todas, de las infraestructuras y obras que pedíamos se encontraban en una situación de parálisis total, sin visos de revertir tal situación en fechas, más o menos, próximas. Nuestro trabajo ha sido no ya sólo conseguir proseguir los trámites administrativos de las obras, sino conseguir que muchas de éstas empiecen a andar.

Ha sido muy importante la labor realizada ante el ministerio de fomento y es de agradecer su voluntad de acuerdo para conseguir que vieran lo importante de nuestras propuestas, no sólo para la provincia de Teruel sino para la mejora de la vertebración de los territorios colindantes y conseguir la cohesión territorial que mandatan los artículos 131,138 y 139 de la Constitución Española. Una negociación firme pero desde el más absoluto respeto entre las partes, apoyada en nuestro caso por abundante documentación que aportaba datos y luz a nuestras reivindicaciones. Lo que demuestra que en estos ámbitos es tan importante o más tener datos que apoyen tus ideas que la importancia e idoneidad de las mismas.

Conociendo todos los datos podemos concluir que el acuerdo firmado es bueno para los intereses de nuestra provincia, y habrá que agradecer especialmente a Tomás Guitarte, un turolense que lleva trabajando de manera desinteresada para Teruel Existe desde hace 20 años su capacidad de negociación, y cuya reputación ha sido puesta en duda de una manera ruin por aquellos que hacen carrera periodística a través de la mentira, la difamación y la manipulación informativa. Estamos satisfechos porque hemos conseguido un texto final del acuerdo muy próximo a nuestro programa electoral, que es nuestro compromiso con los turolenses. Un programa que emana de 20 años de reivindicaciones en las calles y en el que está reflejado, y aquí es justo reconocer, el trabajo de muchos turolenses que desde el movimiento ciudadano han trabajado incansablemente y de forma voluntaria por su tierra.
Creo que esta aclaración era necesaria para contestar a aquellos que desde la ignorancia, incluso del texto del acuerdo, se han lanzado a criticarlo. Nuestra labor ahora es trabajar para que se cumpla todo lo firmado y conseguir que las líneas que marca el acuerdo, para conseguir la reversión de nuestra situación, pronto empiecen a verse realizadas. Un acuerdo que es bueno para todos los turolenses, a los que invitamos a leerlo en nuestra web (https://teruelexiste.info/) y defenderlo donde sea necesario.

Joaquín Egea – Teruel Existe Alcañiz