Si he de ponerle algún calificativo al año que hoy termina, sería «intenso». Intensa fue la primavera electoral con triple convocatoria a las urnas para elegir representantes políticos a nivel estatal primero, y autonómicos y municipales después; y tras el intento fallido para formar gobierno en Madrid con su posterior repetición electoral hemos vivido este 2019 que nos deja, casi en un perpetuo estado de campaña electoral, y terminamos el año expectantes e ilusionados, ante la posibilidad de que nuestro país cuente con el primer gobierno de coalición en sus cuarenta y un años de democracia que sea capaz a través del diálogo, de llevar a cabo políticas progresistas, igualitarias, sociales, sostenibles, ecologistas y feministas, cuyas metas sean conseguir la justicia social y la justicia territorial que tantos y tantas anhelamos.

Intensas también fueron las negociaciones este verano hasta conformar el actual gobierno de Aragón, gobierno del que hoy podemos sentirnos muy orgullosas ya que, por un lado, nos sentimos reflejadas en ese gobierno que se está intentando construir en Madrid, donde el diálogo, la amplitud de miras y el respeto se han puesto a trabajar conjuntamente para llevar a cabo no solo políticas progresistas y sociales, sino también para plantarle cara las derechas más reaccionarias y fascistas. Y por otro, por la firmeza que contra lo que muchos desearían, este gobierno autonómico está demostrando en el cumplimiento de los objetivos y los pactos acordados entre las cuatro fuerzas que lo componen. Mientras se termina de definir cómo será ese gobierno que dirigirá España, Aragón no puede parar.

Ayer se aprobaban en nuestro Parlamento los presupuestos para el próximo año. Así se cumple una de las metas fijadas por este gobierno: que el 1 de enero de 2020 nuestra Comunidad pueda disponer de unas cuentas que pongan en marcha políticas y acciones que beneficien a toda la ciudadanía.

Así que intenso ha sido también el otoño para toda la gente de Podemos que ha estado trabajando dentro y fuera de las instituciones para impulsar, en las áreas en las que tenemos responsabilidades de gobierno, políticas verdaderamente progresistas.

En Podemos sabemos que los cielos de Gúdar-Javalambre son especiales, que solo hay diez en el mundo como el nuestro que tengan la doble certificación de Destino Turístico y Reserva Starlight, que los turolenses tenemos nuestro particular Hawaii, por eso desde la Consejería de Ciencia, Universidad y Sociedad del Conocimiento hemos duplicado el presupuesto para el Centro de Estudios de Física del Cosmos de Aragón, y gracias a ello se van a crear veintiún puestos de trabajo donde se pueda desarrollar todo el talento investigador de nuestros jóvenes. Con la mirada en el cielo, pero los pies en el suelo, desde el CITA vamos a poner la investigación al servicio del desarrollo de las riberas del río Martín y el río Guadalope generando nuevas opciones de empleo a través de la recuperación de sus riberas, tierras abandonadas pero con alta calidad y contando con la participación de nuestra gente, quienes mejor conocen todo su potencial. Tan reiterados como incumplidos fueron los anuncios por parte de los anteriores gobiernos de la llegada de la banda ancha a nuestros pueblos y polígonos vaciados, pero ha sido Podemos quien en tan solo cuatro meses ha lanzado la convocatoria que permitirá la conexión a internet a setenta y siete municipios turolenses; voluntad política se llama. Y si algo ha marcado nuestra agenda este otoño, ha sido la lucha contra el cambio climático, desde la COP25 o poniendo en marcha medidas de eficiencia energética, aprendiendo a gestionar residuos, protegiendo los espacios naturales, hasta llegar a la constitución del Consejo Aragonés del Clima.

Con la humildad y el reconocimiento de lo mucho que queda por hacer, pero con las satisfacciones que nos ha dado este intenso 2019 gracias al esfuerzo de quienes pensando diferente han sabido dialogar y trabajar conjuntamente, mañana Aragón estrenará década y presupuestos. Feliz 2020.

Marta Prades Diputada de PODEMOS en las Cortes