Casi un centenar de curvas separan las localidades de Las Parras de Castellote y Aguaviva en apenas nueve kilómetros de un recorrido sinuoso, con un pavimento muy deteriorado y con un ancho de vía que apenas permite cruzarse dos vehículos en algunos puntos sin salirse de la calzada.

Según el Plan de Inversión en Carreteras Provinciales 2017-2019, aprobado por la Diputación de Teruel el día 31 de mayo de 2017, estaba prevista una actuación de mejora en dicha carretera con una partida de 250.000 euros a ejecutar en la anualidad 2019. Evidentemente, esa inversión todavía no ha llegado, y la carretera sigue presentando un estado deplorable y muy peligroso para los que deben circular por ella a diario.

Durante la reciente borrasca Gloria, no fue hasta casi una semana después de comenzar el temporal cuando se pudo retirar la nieve de la calzada, viéndose obligado el Ayuntamiento de Aguaviva a abrir con sus medios casi dos kilómetros de la misma para poder acceder a su captación de agua principal. Y es que, además de esta importante infraestructura para el abastecimiento básico de la población, la vía también da acceso a las instalaciones que dotan de los servicios de telecomunicaciones a varias localidades de la zona, así como parte del suministro eléctrico.

La institución provincial está actualmente inmersa en la tarea de poner al día las vías de nuestro territorio, muchas de las cuales no han contado con los trabajos de mantenimiento y acondicionamiento necesarios en las últimas décadas. La reciente eliminación de las reglas fiscales va a permitir aumentar la inversión en este ejercicio y el próximo, por lo que a buen seguro que las carreteras provinciales se podrán beneficiar también de esta medida, que permitirá a su vez dinamizar la contratación pública y, por tanto, las economías locales.

Esperemos pues que la TE-8301 pueda ser una de las receptoras de esas indispensables mejoras ya que, si realmente queremos dotar de vida a nuestro medio rural, no nos podemos permitir que, bien entrado el siglo XXI, todavía conservemos vías de comunicación más acordes quizás con otros tiempos.

Aitor Clemente – GANAR Aguaviva