La A-68 y el hospital de Alcañiz son dotaciones claves para el desarrollo de todo el norte de Teruel. Los dos proyectos avanzan con dificultades poco a poco, pero no puedo dejar de confiar en que se van a acelerar si trabajamos juntos y con lealtad. Son proyectos que ocupan varias legislaturas, varios gobiernos y que al final, la suma de aciertos y errores de nuestros representantes electos dan un resultado mas rápido o lento. En resumen, son infraestructuras tan importantes que deberían salir del debate de quién lo consiguió o quién tendría que haber empujado mas. No pueden ser arma arrojadiza, pues todos los que han gobernado o gobernarán pueden sentir estos proyectos como suyos, igualmente los partidos de oposición que haya hecho su labor correspondiente.

Sobre la autovía, ya da gusto ver obras y proyectos en marcha en los tramos zaragozanos y noticias de estudios en la zona turolense. A la par, conocer por la prensa los avances en el puerto de Querol que alimentan también el optimismo, aunque es cierto que mejor hubiera sido una década antes. Nuevos tramos que sitúen estratégicamente el Bajo Aragón entre la 5ª ciudad de España y el litoral mediterraneo son fundamentales para fomentar la implantación de empresas de manera competitiva, donde encuentren la rentabilidad de sus negocios sin una dependencia total de las subvenciones.

Sobre el hospital quiero pensar que con la salida de la pandemia se acelerará, porque ha pasado por fases muy desafortunadas y volviendo al ser competitivos, tener una infraestructura moderna y pública, también fomenta y hace mas fácil que muchas familias encuentren en nuestra zona su lugar para establecerse. Hoy quiero ser muy positivo y pensar que si remamos todos juntos y pensamos en el medio y largo plazo, podemos llegar a ver avances muy importantes en los próximos años y recordar el Covid 19 como un mal sueño.

Pedro Bello. GANAR La Puebla de Híjar