La nueva ordenanza abre la puerta a multar por no recoger los excrementos de perro de la calle identificándolos con un análisis
Alcañiz ya cuenta con una nueva ordenanza reguladora de la 'tenencia responsable de animales de compañía, su protección y venta así como de la convivencia entre éstos y las personas'. Un reglamento que se ha aprobado definitivamente en pleno por unanimidad este martes después de tener en cuenta parte de las alegaciones recibidas y que entrará en vigor en los próximos días una vez se publique en el Boletín provincial.
Ya se le dio el visto bueno en abril pero se recibieron alegaciones durante el periodo de exposición pública que se tuvieron que estudiar. Hubo varias propuestas de cambio de dos personas, una de ellas un representante de una entidad animalista que venía refrendada de numerosas firmas. En comisión se desestimaron algunas de las alegaciones al considerar que ya estaban especificadas en la ordenanza y otras se han redactado para que queden más claras. En el pleno todas las intervenciones de los concejales han hecho hincapié en «el buen talante» que ha reinado en la comisión de Medio Ambiente durante toda la legislatura y la unanimidad que ha habido para sacar adelante esta y otras ordenanzas.
Con la ordenanza, Alcañiz abre la puerta a multar por no recoger los excrementos de perro de la calle mediante el análisis de ADN. Identificar al dueño del can que no recoge las heces es muy complicado por lo que el Ayuntamiento ampliará su censo municipal de animales, en el que se incluye obligatoriamente una muestra de ADN. Los alcañizanos tendrán un periodo de margen para registrar el ADN de sus mascotas.
Se trata de un documento que actualiza, amplía y mejora la norma municipal anterior adaptándola a los principales problemas en la convivencia entre vecinos y animales. Establece un protocolo y multas para las principales cuestiones que surgen en el día a día como los excrementos en la calle y los perros sueltos, entre otras.
Con el registro obligatorio del ADN se podrán analizar en el futuro los excrementos para multar a los dueños con 300 euros y el pago del coste de los estudios. Una iniciativa «de futuro» para la concejalía, que no tiene marcada una fecha establecida ni protocolo de actuación o personal específico para ello. Por ahora, se dejará primero un plazo de un año para que los alcañizanos inscriban a sus mascotas. «Se trata de una iniciativa que se está llevando ya en otras ciudades porque es la única fórmula para identificar a los propietarios de los canes», explica el concejal del área, Nacho Carbó.
Zonas seguras de esparcimiento
Asimismo, otra novedad es que se establecen una serie de espacios reservados para la «convivencia compartida y segura» en las que los perros podrán ir sueltos. Estas zonas son el parque de los brigadistas en la ronda de Caspe, el antiguo fortín carlista bajo el Conservatorio, la zona verde bajo la Escuela Infantil municipal «La Selveta» y ribera del río Guadalope desde el azud hasta las instalaciones de aceites Gaibar.
Yo dice
Por fin.aunque 300€ me parece poco