Los redobles de tambor suenan en las calles y plazas, en los balcones y ahora incluso en el cielo. Juan Gabriel Pastor, un tamborilero de Mula (Murcia), ha sobrevolado en parapente la playa de Santa Pola en Alicante. Cada vez que sale de su municipio -incluido en el Consorcio Nacional de los Pueblos del Tambor y el Bombo- Pastor lleva con él su tambor, al que le denomina «mejor amigo». Su hazaña es de admirar, ya que logró hacer sonar el instrumento en movimiento, a una considerable altura y con el aire en contra.
«Comprobar que puedes tener el control de tu tambor y palillos en vuelo ha sido espectacular y difícil de conseguir», explica Pastor. El tamborilero voló de la mano de un experimentado monitor, a quien le agradece tanto la oportunidad, como la seguridad y la tranquilidad que le transmitió en el transcurso del viaje.
«Ver atardecer montado en parapente y a la vez tocar mi tambor de Mula ha sido una de las sensaciones únicas que he vivido y nunca olvidaré», señala Pastor, quien recuerda cómo las sensaciones que vivió redoblando su tambor «le hicieron tocar el cielo de forma literal». Afirma que «las vistas únicas de la playa de Santa Pola se quedarán en su retina» y «el sonido de su tambor con las notas al aire, en su memoria». «Durante los minutos de vuelo sentí una desconexión única y mi sonrisa demuestra la felicidad de ese momento», añade.
No es la primera vez que este tamborilero luce el toque de Mula fuera de casa. Además de no perderse las Jornadas Nacionales de Exaltación que se celebran en los municipios del Consorcio, entre ellos, los nueve pueblos de la Ruta del Tambor y el Bombo, ha viajado con su tambor fuera del país. Ha estado en Senegal, en Escocia tocando con un gaitero y en París redoblando bajo la Torre Eiffel y el Arco del Triunfo.
En España sus redobles se han escuchado en la Puerta del Sol y la plaza Callao de Madrid, el Monasterio de San Lorenzo de El Escorial, la Ciudad de las Artes y las Ciencias de Valencia, la Albufera de Valencia montado en barco, el mirador de la Alambra en Granada, la plaza del Pilar en Zaragoza, el municipio Ardales en Málaga, y las localidades de Teba, Setenil de las Bodegas y Ronda en la provincia de Cádiz.
«Me encanta ser embajador del tambor de mi pueblo, tengo historias muy bonitas en cada lugar que visito y siempre conozco gente nueva que se interesa por nuestra tradición y se la puedo transmitir», explica Juan Gabriel Pastor. Por delante, todavía tiene muchas aventuras en las que embarcarse con su tambor.