El próximo lunes se pondrá en funcionamiento el tren turístico de Alcañiz y se alargará hasta el 19 de agosto. Una de las novedades del año pasado y que continúa en la actualidad es la visita guiada que incluye un recorrido sin paradas por las calles más emblemáticas del casco urbano.
El ferrocarril, que el año pasado en un primer momento no iba a efectuarse y que tuvo que retrasar sus rutas hasta el 12 de agosto, este año lo hará con total normalidad. Se plantea un recorrido similar al de años anteriores, con un cronograma que consta de tres viajes por la mañana y otros tres por la tarde que partirán desde la plaza de España.
La trayectoria realizará expediciones diarias de 40 minutos aproximadamente y las salidas se efectuarán a las 11.00, 12.00 y 13.00 y a las 17.30, 18.30 y 19.30 en horario de tarde. El vehículo cuenta con un total de 56 plazas, y los tickets se venderán en el propio acceso al mismo, en estricto orden de llegada. Se recomienda a los pasajeros que estén unos 15 minutos antes de cada salida.
En cuanto al resto de expediciones se establecerá un precio de 3,5 euros por ticket para los adultos, dos para los menores de once años y gratis para los que tengan menos de un año. Se trata de una apuesta del ayuntamiento que llevan trabajando desde junio «porque es un servicio que tiene gran demanda y muy querido por ciudadanos y visitantes», explica la concejal de Turismo del Ayuntamiento de Alcañiz, Belén Adán.
El tren turístico discurre de manera cómoda y a baja velocidad. Lo hace por los espacios patrimoniales clave del entorno de la Plaza de España, empezando por la Casa Consistorial y la iglesia de Santa María. Además, también recorre los entornos más reconocidos de la zona de ribera cercana a Torreones y la muralla, el Centro de Interpretación de los Iberos, el Refugio, así como las arterias principales del centro de Alcañiz y los aledaños del Castillo de los Calatravos.
Así, vecinos y visitantes disfrutan de una muy buena forma de conocer la ciudad desde otro punto de vista con amigos y familiares. «Además, con el aliciente de ser un plan diferente, ya que el tren pasa por calles del casco histórico que no están incluidas en las guías habituales, así como por las zonas de expansión como avenida Aragón», señala Belén Adán.