La ansiada actuación va recogida en los Presupuestos de 2018 que ascienden a 3,5 millones y que se aprobaron el miércoles
El Ayuntamiento de Valderrobres aprobó el miércoles las cuentas para 2018 que ascienden a 2,2 millones de euros más 1,3 millones de la Sociedad Municipal lo que supone un total de más de 3,5 millones de euros.
En el capítulo de inversiones destaca la construcción de un nuevo vial en la Calle Lope de Vega que sustituirá al actual camino que discurre por una zona de huertas denominada La Sequiola y que constituía un cuello de botella para automóviles y viandantes llegando a limitarse la circulación de automóviles. Para ello se invertirán 400.000 euros y su construcción permitirá resolver uno de los mayores problemas urbanísticos que tenía el casco urbano de Valderrobres al permitir comunicar el centro con el Oeste del casco urbano, donde se halla una zona residencial, el Instituto y las instalaciones deportivas entre otros, evitando la carretera. Se trata de una de las actuaciones más demandadas y esperadas por los valderrobrenses. «La actual situación económica permite ejecutar un proyecto que creemos muy necesario para Valderrobres», explicó Carlos Boné, alcalde de Valderrobres.
Los trabajos comenzarán el próximo año y está previsto que se finalicen en septiembre.
Otro de los apartados en los que, destacan, se invertirá nuevamente es en gasto social, manteniendo las bonificaciones de las guarderías. «Es un presupuesto acorde a nuestra situación en la que durante estos 10 años de gestión hemos eliminado la deuda. Y pese al techo de gasto podemos decir que mantenemos una inversión muy aceptable», manifestó Carlos Boné alcalde de Valderrobres. Desde el equipo de Gobierno se destacó además la bajada de algunas tasas como es el caso del IBI urbano y rústico un 6,2% y un 50% respectivamente., así como el aumento del coste de recogida de basuras que asumirá el Ayuntamiento.
Las cuentas fueron aprobadas por unanimidad por el equipo de gobierno del PP, el edil de PAR y los tres representantes de CHA. «Nos parecen unos presupuestos correctos. Algunas partidas nosotros no las hubiésemos ejecutado igual, pero en comisiones pedimos información y se nos dió», explicó Roger Berbel, de CHA.
Moncho Beseit dice
Mol be, la sequiola arreglada.