Unos 180 niños aprenden sobre la arraigada tradición de pintura de huevos de Pascua en el Centro Joven de Alcañiz

FOTOGALERÍA. Se trata de una iniciativa impulsada por el Ayuntamiento de Alcañiz junto a Océano Atlántico, en colaboración con las Asociación de Rumanos del Bajo Aragón (a.RO.ba)

Unos 180 niños y niñas han participado este pasado fin de semana en el taller de pintura y decoración de Huevos de Pascua desarrollado en cuatro turnos diferentes en horario de 16.30 a 18.00 en el Centro Joven de Alcañiz. Se trata de una iniciativa impulsada por el Ayuntamiento de Alcañiz junto a Océano Atlántico, en colaboración con las Asociación de Rumanos del Bajo Aragón (a.RO.ba), que ha coincidido precisamente con el Domingo de Resurrección de la Semana Santa Católica.

La pintura del huevo de Pascua en sus diferentes modalidades es una arraigada tradición que define esta celebración en Rumanía, además de otros países del centro-este de Europa. «En cada turno se ha trabajado con 60 niños y también han participado unos 20 sin inscripción, que también han podido aprender sobre esta práctica tradicional que seguimos manteniendo los residentes rumanos del territorio bajoaragonés. Hacemos un balance muy positivo y estamos muy contentos por el interés suscitado», ha destacado Daniel Cheres, presidente de la Asociación.

Contando con varios voluntarios integrantes de la Asociación rumana se han habilitado varias mesas de trabajo donde se han desarrollado diferentes técnicas de pintura del huevo de Pascua, como por ejemplo: pintura con colorante especial, técnicas con pincel, contornos de hojas de diferentes plantas o incluso utilizando el calor de una vela, entre otras. Así, grandes y pequeños han podido conocer de primera mano el desarrollo y explicación de esta tradición, un elemento clave en la Semana Santa cristiana, en particular muy respetada en la Semana Santa Ortodoxa rumana que se celebra este año del 18 al 24 de abril (Domingo de Resurrección en la religión Ortodoxa).

El folclore conserva varias leyendas cristianas que explican por qué los huevos de Pascua se vuelven rojos (el color predominante en esta tradición, aunque también son utilizados ampliamente otros colores), una práctica que se ha convertido en símbolo de la fiesta de la Resurrección. Una de las leyendas relata que la Madre de Dios, que había venido a llorar a su hijo crucificado colocó la canasta de huevos cerca de la cruz y se sonrojaron por la sangre que goteaba de las heridas de Jesús.

La ultima actualización de esta noticia fue 21 Abr 2022 21:09