Diez años de homenajes cantados del Grupo vocal francés Santolea

Bajoaragoneses por el Mundo: Antoine Ballesteros desciende de Santolea, pueblo al que homenajea con su grupo vocal en Francia

Bajoaragoneses por el Mundo: Antoine Ballesteros desciende de Santolea, pueblo al que homenajea con su grupo vocal en Francia

Dicen que mientras haya quien te recuerde, no estarás muerto. Por esto Santolea será un pueblo desalojado pero jamás abandonado. Todos los años desde hace nueve, Castellote es punto de reunión de vecinos que tuvieron que dejarlo todo ante la construcción de un pantano. Hijos del pueblo y descendientes se reúnen para verse, abrazarse y recorrer un momento juntos lo que queda.

Santolea Viva es el lema y el nombre de la Asociación Cultural. El pueblo da también nombre a una agrupación coral. La peculiaridad es que sus doce integrantes son franceses y ninguno, salvo uno, tienen vínculos. Se trata de Antonio, -o Antoine ya que es francés-, Ballesteros de apellido que decidió rendir un homenaje a su padre, nacido en Santolea en 1914, y a los vecinos. «Un homenaje cantado», dice risueño al otro lado del teléfono desde Le Mans. Es la ciudad en la que se estableció su padre Juan Manuel cuando cruzó los Pirineos. Hizo la travesía al exilio al final de la Guerra Civil, bastante antes al desalojo de Santolea. Antes de establecerse en Le Mans sobrevivió al campo de concentración de Argelès, en el sur de Francia, y a la II Guerra Mundial. «Fue un camino muy duro pero sus hijos no conocíamos nada, era un tema tabú», dice Antonio en un perfecto español, idioma del que es profesor. Su padre falleció cuando él tenía apenas 16 años, a comienzos de los 70, y no poder hablarlo le llevó a indagar por su cuenta. Él y sus hermanos adquirieron la doble nacionalidad y en 2006 viajó a España. Llegó a Alcañiz, donde descubrió que tenía familia en Puigmoreno.

Las casualidades que le llevaron a la localidad y la gente que le ayudó a contactar con sus raíces, dan para mucho más pero este viaje fue también el inicio del grupo. «Conocí entonces el pueblo y lo que pasó. Canto en un coro y en varias formaciones y se me ocurrió la idea», añade. Sus compañeros accedieron gustosamente a adoptar el nombre en cuanto supieron de la historia. No obstante, primero se llamaron «La cuadrilla del tío Bicicleta» en honor al padre de Antoine apodado así, pero pronto derivó en Grupo Vocal Santolea. Se estrenaron en 2009 en la capilla del Parador de Alcañiz y en Castellote, Las Parras y Mas de las Matas y decidieron continuar con la agrupación. En su repertorio caben desde cantos del Renacimiento europeo y música sacra, hasta canciones hispanoamericanas como tangos de Gardel.

Son cuatro cuerdas (soprano, alto, tenores y bajos) y tres personas por cada una. Doce voces que un par de veces al mes dan un concierto en Francia, sobre todo, en el oeste, y acuden a certámenes. Antes de actuar, explican al público el nombre de la coral y la historia de Santolea. En abril regresaron a España en su décimo aniversario para cantar en Zaragoza, Castellote y Alcañiz. Se reunieron con muchos santoleanos pero no fue posible coincidir con la reunión anual a la que Antoine espera poder asistir en 2020. «Nos apasiona cantar y de alguna manera participamos en mantener al pueblo vivo a través del canto», concluye.

La ultima actualización de esta noticia fue 11 Jul 2019 13:08