¿Cardenal? ¡Yo me veo como cura de pueblo!

Omella recibió a La COMARCA en agosto de 2016 en Cretas, donde en verano pasa unos días de vacaciones

Omella recibió a La COMARCA en agosto de 2016 en Cretas, donde en verano pasa unos días de vacaciones

El Arzobispo de Barcelona, el cretense Juan José Omella recibió en su localidad natal, Cretas, al periodista de La Comarca Javier de Luna en la casa parroquial de la localidad matarrañense mientras disfrutaba de unos días de vacaciones.

¿Se ve usted como Cardenal?
¡Yo me veo como cura de pueblo! Lo cierto es que ahora soy Arzobispo, ¡que ya está bien! Nunca me lo hubiera imaginado y por supuesto nunca sabes qué va a ocurrir, pero yo ahora mismo no pienso en eso.

Estamos en tiempos de cambio, como cuando se produjo el Concilio Vaticano II. ¿Cree que es ahora momento de reformar la Iglesia?
Sí, la sociedad está en cambio y eso se llama «crisis», la crisis es cambio; en algunas cosas avanzamos y en otras nos equivocamos; el cambio es global y además muy rápido. Ciertamente las instituciones son más lentas, pero el estilo del Papa Francisco es de cambio, con coherencia de vida y es aquí donde hay que buscar los cambios. No en cómo vamos vestidos, si no en cómo llegamos a la gente. La Iglesia no puede ser prepotente, debe ser acogedora, no condenar si no abrazar, caminar con los pobres y hablar de esperanza, de Dios, este es el mensaje del Evangelio y esto es lo que está visibilizando el Papa. Siempre ha habido épocas; los jóvenes ahora se sienten muy vacíos por el paro, la droga, el sexo desaforado… todo ello no lleva a la felicidad. Yo en África no he visto el suicidio pero aquí se da. El joven debe tener esperanza porque es constructor de futuro.

¿Qué opina de que se empiece a hablar de asuntos como la corrupción, los desequilibrios económicos o el matrimonio igualitario?
El Papa tiene un estilo muy directo, y llega al corazón; es un hombre de alegría y esperanza y no se aleja de la enseñanza del Evangelio, esto hay que resaltarlo. Pero centra todo en la persona humana, por encima de todo. Poner en el centro de la economía a la persona y no al euro, en el centro de la familia y de la política. Hemos sustituido a Dios, por el dios dinero y por el dios política. Cuando los europeos nos hemos alejado de Dios, Europa se ha vuelto contra el hombre y hemos llegado a situaciones como las de los campos de concentración. Ahí el dios «raza» se volvió contra judios, cristianos… En resumen, contra el hombre. No podemos volver a caer en lo mismo. El hombre es religioso por naturaleza.
¿Cómo ve el clima político y social desde Barcelona?¿Cree que sobre todo los jóvenes son practicantes?
Lo veo tranquilo; es una ciudad próspera y muy cultural, se nota que la gente tiene muchos estudios y además es religiosa. Los jóvenes también practican; hay muchos que han perdido la fe, eso es innegable, pero en Barcelona veo más jóvenes que rezan que en otros lugares del país en las que he estado. Los catalanes son muy cordiales, me han acogido muy bien y estoy muy contento porque lo importante es saber llegar a la gente, no su procedencia. Confiemos ahora en que los políticos solucionen los problemas de la gente.

¿Cómo ve las relaciones entre las diócesis de Barbastro y Lérida?
Pues ahí están, todas las tormentas pasan. Los bienes quiero y además creo que volverán porque las sentencias deben cumplirse.

¿Presume de pueblo en Barcelona?
¡Siempre! Me preguntan mucho en Barcelona y cuando vuelven de conocer Cretas me dan la razón. He vivido aquí, venía después a veranear y guardo esa buena relación con todos los vecinos del pueblo. Estos días de descanso he oficiado en Lledó, Arens y aquí en Cretas donde desgraciadamente hemos tenido dos entierros seguidos. Pero qué bonito es ver cómo todo un pueblo se vuelca en acompañar a las familias, es un símbolo de solidaridad y aporta consuelo. Siempre se ha hecho así y no debemos perderlo.

La ultima actualización de esta noticia fue 21 Sep 2020 19:07