Cuando la Virgen de Pueyos bajó a la plaza de Alcañiz entre un gran fervor

La patrona llegó al pueblo en el 61 y 62 con un gran recibimiento con ofrenda de flores y recital de jotas

La patrona llegó al pueblo en el 61 y 62 con un gran recibimiento con ofrenda de flores y recital de jotas

Que la Virgen de Pueyos llegó a bajar a la plaza Alcañiz durante dos años consecutivos es un dato que pocos conocen (o recuerdan). Hay que remontarse a casi seis décadas atrás, a los años 1961 y 1962, para encontrar documentación escrita de la llegada de la patrona a la plaza España en su festividad, el 9 de septiembre. Así lo atestiguan los anuarios parroquiales y los libros de fiestas de esos años que se guardan en el Archivo Municipal. La incógnita sin resolver es conocer por qué motivo se bajó en romería a la Virgen. En los escritos tan solo se deja constancia de que se anunció que la imagen solo iba a visitar la plaza durante dos años, el 61 y 62 lo que provocó que muchos vecinos enviaran cartas en las que incluso se reclamaba un «plebiscito popular para que se demuestre palmariamente la voluntad del pueblo».

Su recibimiento los dos años fue triunfal con una plaza llena a rebosar de alcañizanos que aguantaron hasta la madrugada en una larga jornada que incluyó una misa, ofrenda de flores y un recital de jotas.

La romería de Pueyos comenzaba en la parroquia hasta el santuario con vecinos subiendo a pie o en carro. En el 61 se celebraron cuatro misas, la última de ellas oficiada por el párroco Rafael Galve y el sermón de Juan Espallargas. Después del almuerzo «a la sombra de los olivos» y previo aviso del bandeo de las campanas, salió la Virgen del templo a hombros de sacerdotes alcañizanos. Para bajar el «aventador» les dieron el relevo los concejales. Tal y como se puede leer en el anuario de la parroquia, en el 61 los gigantes bailaron «ante los ancianos del amparo, quienes aplaudieron sin cesar» y en el puente se unió la banda de música tocando el himno nacional. Las religiosas Dominicas pidieron esa misma mañana que la Virgen pasara por la puerta de su convento, ya portada entonces por vecinos. «Las monjitas cantaron a la Virgen y Sor Teresita, buena alcañizana, cantó dos jotas a su patrona ¡emoción y llantos! Era un río de gente la calle Mayor. Aplausos y flores desde todos los balcones, canto del himno de Pueyos sin cesar», explica el anuario.

La llegada a la plaza España se califica de «apoteósica». La Virgen se colocó en la Iglesia Parroquial y después se celebró una misa. Hasta las siete de la tarde se celebraron turnos de vela. Una hora antes se rezó el rosario y se hizo la solemne novena en su último día en una Iglesia «llena a rebosar». Después la Virgen fue llevada por baturros a turnos hasta su «magnífico trono ante la puerta del Palacio Municipal». «¡Nunca hemos visto la plaza tan llena y enfervorizada! El himno nacional, ¡aplausos! El himno de Pueyos, ¡vivas! el delirio…».

Colocada la Virgen en su trono y las autoridades a su alrededor, comenzó una ofrenda de flores en la que se contaron 483 ramos en el año 61 y 648 en el 62; la gran mayoría entregados por baturros. Después hubo un discurso del vigía de la Torre Nueva de Zaragoza, José Mª Zaldívar (apodo por el que se conocía a un periodista que conducía un programa de mismo nombre en Radio Zaragoza). Después, la Virgen quedó vigilada por la policía hasta que a las 23.00 hubo un recital de jota. Los vecinos seguían de pie sin moverse en una plaza repleta que resistió hasta que a las dos de la madrugada pudo ver a su virgen regresar al santuario con una «marcha triunfal». La comitiva incluso tuvo que parar varias veces en la calle Mayor para escuchar las coplas joteras. En el puente fue colocada en una carroza con la que se subió a Pueyos seguida de más de una cuarentena coches. Arriba fue colocada en el altar entre «vítores y aplausos».

La ultima actualización de esta noticia fue 19 Abr 2019 10:49

Ver comentarios (2)

  • Es como tendrá que ser... Nuestra Sra. tendría que bajar al pueblo.

  • Después de esta pandemia seria entrañable volver a bajar a la Virgen al pueblo y aunque solo fuera un turno pirtada por familiares de muertos por el Covid y otro por añcañizanos ausentes. No se en estos momentos de zozobra canto se echa de menos noticias de Alcañiz
    Un saludo a todos mis paisanos