‘Matarraña despierta el alma’ es el nuevo proyecto turístico con el que la Asociación de Empresarios, en colaboración con la institución comarcal, busca dar un paso más en el desarrollo de este importante bastión socioeconómico que supone el turismo para la zona.
Fue presentado al público este jueves por la mañana en el Santuario de la Virgen de la Fuente de Peñarroya de Tastavins y contó con la presencia de medio centenar de asistentes entre los que destacaron algunos responsables políticos y varios de los principales empresarios del territorio. «Siempre sumamos por ir hacia adelante y por sumar por la convivencia entre los vecinos y los visitantes que vienen a la comarca del Matarraña. Queremos llegar a una cordialidad en el que el bienestar del turismo sea el enclave para que todo funcione», destacó el presidente comarcal, Isel Monclús.
El proyecto responde a la intención de posicionar al Matarraña como destino de bienestar, una tendencia que, según ha explicado el profesor de Turismo en la Universidad de Girona y director del proyecto, Edgar Tarrés, está cada vez más presente como forma de vida. «Cada vez hay más gente que quiere aprovechar su vida. El turismo de bienestar se ha convertido en una necesidad. Queremos explicar lo bien que se vive aquí. Lo entendemos como un intercambio entre las personas que ya habitan el Matarraña con las que vienen de fuera», destacó Tarrés.
Así pues, se busca ir más allá de lo convencional con un turismo basado en lo experiencial vinculado, por supuesto, al territorio. Además, quiere hacerlo de manera sostenible y también desestacionalizar estos proyectos turísticos. «Esto es un proyecto transversal a largo plazo. Formación, talleres, promoción… Damos por hecho el turismo sostenible en el Matarraña. Ahora buscamos equilibrio y trabajamos por un turismo que se desestacionalice y que no sea invasivo», añadió Ana Marta Romeo, representante del sector turístico de la Asociación de Empresarios de la comarca del Matarraña.
Los pasos del proyecto
En este sentido, ‘Matarraña despierta el alma’ arrancó en noviembre. Por entonces se realizó la primera formación para empresarios a la que también asistieron terapeutas, artesanos, pequeños productores y emprendedores o artistas. Posteriormente, le siguió un video promocional donde se ha querido mostrar los valores y los elementos que hacen del Matarraña un lugar que «despierta el alma». Este audiovisual también fue presentado al público este jueves en Peñarroya y está ya disponible en la web comarcal y en el canal de youtube Somos Matarraña. Ahora, la hoja de ruta es continuar desarrollando el proyecto con diferentes campañas en redes sociales.
La ultima actualización de esta noticia fue 23 Feb 2023 20:20
Ver comentarios (7)
Bienestar masificado
Masificado dónde? Has salido de tu masía?
En Beceite, Pesquera, Parrizal, Valderrobres, La Fresneda y Salt.
A estos sitios mejor no ir porque está lleno de gente o no hay sitio donde comer o te clavan unos precios que te mueres.
Estos lo que quieren es estar solos. No quieren granjas, no quieren aeroeneradores, no quieren motos, no quieren tractores, y no quieren más hoteles
Creo que el problema está bastante claro. No hay que aumentar las plazas hoteleras, o si se aumentan, que sea otro tipo de establecimiento, como un hotel que pueda acoger autobuses. Eso desestacionaliza y atrae, entre otros, a gente del Imserso que ahora se van a Alcañiz y a Morella. Lo explicaron muy bien en un artículo que leí aquí de una persona con muy buen criterio y que ha potenciado la oferta cultural. Ahora tienen que ser los demás los que se apliquen y amplíen la oferta comercial, gastronómica y de ocio.
Pero no tiene sentido hacer más casas rurales y viviendas turísticas y luego no ofrecer más comercios, restaurantes, más bares (abiertos) un triste pub para poder tomar una copa y muchas cosas más que son las que faltan. NO más plaza hoteleras de casas rurales. Que además son el CÁNCER para que luego no haya viviendas disponibles para jóvenes, parejas, familias con hijos... ni para alquilar ni para comprar.
No hay emprendedores y es la triste realidad. El que tiene dinero y propiedades monta casas rurales, no crea puestos de trabajo, atrae a más turistas, masifica más la zona pero luego esa gente no tiene servicios ni oferta de ocio. En muchos pueblos turísticos por no poder, no puedes ni pagar con datáfono y muchas veces no encuentras ni un bar abierto para tomarte un café.
Eso y luego los anti-todo que quieren llenar de molinos el Matarraña. Como si eso fuese solución para algo. A veces creo que son gente de esas promotoras, porque si no, no se entiende.
Tengo la sensación que leyendo las palabras en negrita (experiencial, sostenible, desestacionalizar..) ya te puedes hacer una idea del contenido del proyecto. Humo, humo y más humo. Palabras vacías que no dicen nada, declaraciones de intenciones, mucha formación, talleres o promoción, pero ninguna acción concreta que pueda revertir los efectos perniciosos del turismo (bajos sueldos, masificación de determinados espacios, gentrificación o mala coexistencia con el resto de sectores económicos).
Los efectos perniciosos del turismo los conocemos muy bien. También sabemos qué le pasaría al Matarraña si desaparece el turismo: tururut, se acabó, fin, game over, despoblación, ruina. Así pues, mejor intentar ser constructivos. A mí tampoco me gusta el turismo, ni hacerlo ni tenerlo cerca. Pero como no tengas un proyecto mágico de creación de riqueza a partir de las granjas y el secano... Y eso no depende del Matarraña, depende de la Unión Europea. Lo de que el turismo baja los sueldos, no sé de dónde lo has sacado. Si están abriendo negocios aquí en Matarraña es porque salen los números. A lo mejor eres funcionario/-a, o pensionista, o vives de rendas y no te enteras de cómo está el patio, pero simplemente mantener un negocio, hoy día, es ya un milagro. Pero incluso los funcionarios de la zona tienen que preocuparse, porque si se va la gente, también ellos se van a tener que ir. En fin, hay que ser positivos. Creo que comparado con otras zonas de España, Matarraña está cuidando muy bien su marca turística. ¡Que así siga!