«¿Era necesario que asesinaran a dos guardias civiles para contar con chalecos?»

En lo único que ha mejorado la Guardia Civil en estos tres años es que ahora prácticamente todos los agentes cuentan con un chaleco antibalas de uso individual. No ocurría lo mismo hace tres años, cuando Caballero portaba uno dos tallas menor

La situación de la Guardia Civil en la provincia de Teruel no ha mejorado y se encuentra igual de mal que hace tres años. En ocasiones no se puede actuar con un tiempo de respuesta aconsejable para que el servicio sea de calidad, no más de 15 ó 20 minutos, debido a la falta de agentes – en todas las convocatorias se marchan más que llegan, en la última el déficit fue de 13-, la gran extensión a cubrir en la provincia y la escasez de medios.

En ocasiones no se pueden acometer actuaciones con la dedicación que exigirían por la falta de medios tal y como denuncia la AUGC, la asociación mayoritaria en la Benemérita. Por ejemplo, no se destina presupuesto a la renovación de la flota de coches y algunos ya demandan un cambio ya que encadenan las visitas al taller.

En lo único que ha mejorado la Guardia Civil del territorio es que ahora prácticamente todos los agentes cuentan con un chaleco antibalas de uso individual. No ocurría lo mismo hace tres años. «A raíz de los asesinatos se dotó de chalecos, ya quedan pocos compañeros sin protección individual. Ya era hora pero, ¿para eso tenemos que perder a dos compañeros? ¿Hay que esperar a que haya dos asesinatos para que todos los guardias cuenten con un chaleco y no vayan con uno que no es de su talla?, se pregunta Cristóbal Soria, portavoz en Teruel de la AUGC, asociación personada como acusación popular en el caso del triple crimen de Andorra.

Una de las negligencias más graves del triple crimen de Andorra es que el chaleco que portaba Víctor Caballero le venía pequeño ya que era dos tallas menor a la que le correspondía por su envergadura física. No le protegió de dos disparos en una zona vital que debería estar cubierta por el «paquete balístico» -la parte del chaleco protegida con una placa metálica para evitar las balas- tal y como lo atestiguan tanto la autopsia como un informe de Criminalística incluidos en el sumario del caso. Esa zona, el tórax, estaba cubierta por el faldón de tela que se emplea para acomodar el chaleco al pantalón debido a que le quedaba muy pequeño. Sin embargo, el de su compañero Víctor Romero, que era de su propiedad y homologado, sí que cumplió su función porque el disparo que impactó en la zona costal no penetró, ya que quedó alojado en el chaleco.

Se agrava la falta de efectivos

En cada ocasión que se convoca la resolución de vacantes normalmente se pierden efectivos ya que es mayor el número de agentes que se marchan que el que llegan. Este déficit supone una merma cada vez mayor en el número de guardias dedicados a la seguridad ciudadana en una provincia con pocos habitantes pero con un gran territorio. Hay ocasiones en las que para conformar una patrulla se tienen que unir dos agentes de distintos puestos porque en una misma localidad no hay suficientes guardias para salir a la calle. Una situación que en periodos festivos como las Navidades se va agravar.

Tampoco se puede atender al ciudadano cuando acude al cuartel ya que la mayoría de puestos del territorio tan solo abren uno o dos días a la semana por falta de personal. El de Alcañiz es el único cuartel de la provincia de Teruel que abre todos los días de la semana y lo hace de 9.00 a 14.00. El de Andorra hace lo propio tan solo de lunes a viernes y el resto en mucha menor medida. Por ejemplo, los de Híjar, Albalate o Valderrobres dos días a la semana y los de Calanda o Ariño, una.

«Hay que dotar de más personal a las unidades de seguridad ciudadana. Me da mucha pena que la sociedad turolense no lo reclame porque van pasando los años y cada vez hay menos guardias en Teruel. Desde la AUGC siempre hemos defendido que el hecho de ser una zona despoblada no quiere decir que contemos con menos seguridad porque los impuestos son los mismos. No deberia haber diferencias en materia de seguridad», apunta Soria.

Las condiciones de los guardias tampoco son las más idóneas para que los nuevos agentes no vean la zona como un lugar de paso. A los citados problemas con los coches se le suma que los agentes deben utilizar sus propios teléfonos para realizar llamadas o buscar una dirección ya que no cuentan con móviles de trabajo. Tan solo son para los jefes de unidad.

La ultima actualización de esta noticia fue 13 May 2021 10:48