La ocupación supera el 75% y apuntala la campaña en el Matarraña y Maestrazgo

El turista del resto de Aragón acude de forma importante al territorio y demanda, principalmente, alojamientos para parejas y núcleos familiares

Moderada satisfacción de los hosteleros y comerciantes de las turísticas comarcas del Matarraña y Maestrazgo. Las expectativas para lo que resta de Semana Santa son relativamente alentadoras y las distintas asociaciones de empresarios y hosteleros han cifrado en torno a un 70% y 80% los niveles de ocupación para lo que resta de puente festivo. La situación, sin embargo, es desigual según el tipo de alojamiento. Mientras en unos tipos de establecimiento hostelero continúa habiendo plazas disponibles, en otro tipo de alojamientos se ha colgado ya ayer el cartel de completo. Es el caso de los hoteles familiares y de las casas y apartamentos turísticos cuyo tamaño es idóneo para una familia. El principal cliente que está acudiendo a ambos territorios es sobre todo familiar.

Pese a que el nivel de ocupación y el gasto en los distintos comercios está siendo, hasta el momento, el más importante de los últimos 6 meses, los empresarios recordaron que esta Semana Santa no llegará a ser, en ningún caso, como las que solían ser habituales antes de la pandemia y que continuarán a expensas de la meteorología que, si bien ayer y el miércoles fue excelente, podría ser más inestable de cara a los próximos días. «Estamos teniendo un importante balón de oxígeno que nos va a permitir trabajar. Muchos establecimientos permanecían cerrados desde octubre y ya se han animado a abrir, pero hemos de recordar que todavía muchos trabajadores van a permanecer en Erte y que no sabemos qué ocurrirá a partir del lunes», explicó Marta Ferrás, presidenta de los Empresarios del Matarraña.

Es precisamente en esta comarca donde se observó una importante llegada de turistas del resto de Aragón, especialmente a partir del Miércoles Santo. En Valderrobres las terrazas y comercios locales han trabajado durante toda la jornada gracias a los visitantes pero también gracias a los clientes locales y de municipios cercanos tanto del Matarraña como del Bajo Aragón. Cabe recordar que el hecho de que en la vecina comarca bajoaragonesa no vayan a salir a la calle tambores y bombos provoca que muchos bajoaragoneses elijan el Matarraña para llevar a cabo una escapada.

Situación muy parecida en La Fresneda, donde la oficina de turismo y comercios como las carnicerías y panaderías registraron una importante demanda. Sin llegar a niveles previos a la pandemia, lo cierto es que han sido muchos los aragoneses que han aprovechado para alojarse y adquirir productos agroalimentarios en los comercios locales. También las empresas de turismo activo comenzaron a recibir llamadas a pocos días del puente. Algunas de ellas tuvieron que reinventarse para atraer clientes que demandan actividades en la naturaleza y que, debido a la prohibición de cambiar de comunidad autónoma, se han visto alteradas. «Nosotros ofrecíamos servicios en la Vía Verde Val de Zafán tanto en Matarraña como en las vecinas comarcas catalanas. Al no poder pasar a Cataluña ahora ofrecemos otro tipo de actividades en el lado aragonés», ha explicado Javier Árias, de Matarraña Aventura.

En Beceite, una de las localidades más turísticas de toda la provincia de Teruel, el goteo de visitantes ha sido lento pero constante ya desde inicios de semana y se ha disparado a partir del Jueves Santo. El Ayuntamiento decidió poner en marcha el control de regulación de acceso de El Parrizal en marzo y ya ha tenido que colgar el cartel de completo. Durante la jornada del miércoles y jueves se tuvo que cerrar el acceso y para la jornada del Viernes Santo están completadas las 85 plazas en dos turnos que constituyen el aforo. «Pensamos que esta Semana Santa va a ser muy positiva para que el visitante del resto de Aragón conozca el Matarraña. Estamos además muy gratamente sorprendidos porque ha venido mucho turista del resto de Teruel», explicó Juan Enrique Celma, alcalde de Beceite quien sin embargo hizo un llamamiento a «cumplir en todo caso» las normas de distanciamiento social. La situación se ha repetido en Calaceite. La Oficina de Turismo de la capital cultural del Matarraña vivió ayer una afluencia constante de personas. Zaragozanos y oscenses fueron los principales visitantes.

El Maestrazgo, «al 80%»

Situación muy parecida se vive en el Maestrazgo donde muchos establecimientos pudieron abrir sus puertas y recobrar cierto nivel de trabajo y otros tantos colgaron ayer el cartel de completo. La gran mayoría de visitantes que se han ido acercando hasta alguno de los 15 municipios y el total de 30 entidades de población que componen la comarca provienen, como es lógico, del resto de Aragón, especialmente de la provincia de Zaragoza. No obstante, desde la asociación de Empresarios Turísticos del Maestrazgo destacaron el importante incremento de turistas procedentes de la provincia de Huesca.

Todo ello pese a que existía cierto temor a que la campaña fuese un desastre debido a la imposibilidad de que hasta el Maestrazgo pudiesen acceder turistas valencianos, a la sazón, los principales clientes potenciales de la comarca. «Creo que no vamos a colgar el cartel de completo pero estamos con unas ocupaciones muy buenas que nos están permitiendo trabajar. Hemos también observado mucho turista de paso, de un día, especialmente motoristas», explicó Pilar Beltrán, presidenta de la Asociación de Empresarios Turísticos del Maestrazgo.

Imagen paronámica de Cantavieja./ Ayto. de Cantavieja

Al igual que en el Matarraña, en el Maestrazgo la demanda es «total» en los apartamentos turísticos y en los alojamientos que ofrecen habitaciones familiares. No tanto, sin embargo, en las casas rurales de gran tamaño debido principalmente al hecho de que las restricciones prohiben compartir vivienda junto a otro núcleo familiar. A la legislación extraordinaria se une el propio temor de los potenciales clientes que, de igual modo, evitan compartir interiores y viviendas con personas fuera del ámbito estrictamente familiar. «Hemos observado que los clientes son familiares y se desplazan en núcleos familiares. Por ello los apartamentos con capacidad para una familia están llenos. No así las casas rurales ya que la gente no puede juntarse con otros núcleos», añadió Beltrán. Por su parte, hoteles como Balfagón de Cantavieja llenaron ayer todas sus habitaciones.

En el caso del Maestrazgo, los visitantes se decantan por la belleza paisajística y horizontes montañosos que ofrece toda la comarca en su conjunto. Cabe recordar que buena parte de los cascos urbanos conservan su trazado y tipismo original. En el caso de Cantavieja y Mirambel forman parte, asimismo, de la Asociación de los Pueblos Más Bonitos de España. Parajes naturales como el nacimiento del río Pitarque, las pasarelas de Valloré y los Órganos de Montoro son solo algunos de los parajes que, durante la primera mitad de Semana Santa, están sumando una mayor afluencia de visitantes.

El interior de restaurantes al 30%

Los propietarios de bares y restaurantes recordaron, sin embargo, que continúa la limitación de aforo en el interior de los mismos y que está establecido actualmente en el 30%. Por todo ello pese a que muchos de ellos están llenando los comedores, quisieron subrayar que, en cualquier caso, es un lleno que sin embargo supone un 70% menos de lo que podrían trabajar en condiciones normales. La situación afecta especialmente a los restaurantes que no disponen de terraza, algo muy común en el interior de los cascos urbanos de los pequeños municipios de ambas comarcas. «Tenemos dos comedores y solo podemos dar en torno a 35 comidas al día debido al aforo. La situación nos está permitiendo trabajar pero no se parece en absoluto a una Semana Santa normal», explicó Loli Collantes, gerente de Fonda La Plaza de Valderrobres, establecimiento ubicado en un edificio antiguo y que no dispone de terraza.

Aumento de caravanas y motocicletas

Siguiendo la tendencia a nivel nacional, el territorio ha experimentado un notable aumento del turismo de, por un lado, autocaravanas y por otro, los grupos de aficionados a recorrer las carreteras sobre dos ruedas. Se trata de zonas de aparcamiento habilitadas para autocaravanas y que ofrecen servicios básicos como Cantavieja, Cretas, Calaceite y Valderrobres. De igual modo muchos grupos de motoristas, especialmente procedentes de Zaragoza, aprovecharon los primeros días del puente para llevar a cabo rutas tanto por el Maestrazgo como por el Matarraña. En estos casos muchos de los integrantes de los grupos moteros fueron turistas de un solo día que, pese a no pernoctar, llevaron a cabo distintas reservas en los restaurantes del territorio.

Mala situación en provincias limítrofes

Pese a que la incidencia del coronavirus en el sector sanitario de Alcañiz y en toda la provincia es relativamente baja a día de hoy, lo cierto es que es bien distinta en la práctica totalidad de provincias limítrofes con Aragón. Lérida, Navarra, La Rioja y Soria encabezan el repunte de casos. Preocupa por ello que puedan «importarse» casos de covid-19 hasta el territorio. Pese a que la gran mayoría de visitantes son del resto de Aragón, lo cierto es también que a pie de calle se escuchan, en algunos momentos, conversaciones de visitantes con acento barcelonés o valenciano. Algunos hosteleros reconocen haber rechazado en los últimos días reservas de clientes de otras comunidades autónomas ante el temor de posibles rebrotes.

La ultima actualización de esta noticia fue 1 Abr 2021 20:42

Ver comentarios (6)

  • Leo esto... "En el caso del Maestrazgo, los visitantes se decantan por la belleza paisajística y horizontes montañosos que ofrece toda la comarca en su conjunto. Cabe recordar que buena parte de los cascos urbanos conservan su trazado y tipismo original. En el caso de Cantavieja y Mirambel forman parte, asimismo, de la Asociación de los Pueblos Más Bonitos de España."...y me pregunto qué pasará cuando inunden esos paisajes y montañas de molinos eólicos. Me temo lo peor porque hoy en día se valora mucho ir a lugares exentos de contaminación visual habitual en las ciudades. Cantavieja y Mirambel caminan al suicidio.

    • Así es, pan para hoy, hambre para mañana. Los molinos destrozarán el paisaje para siempre. Y luego el INAGA tendrá la jeta de decirme que no puedo hacer una cubierta plana en mi casa de campo porque desentona con el paisaje y la arquitectura tradicional de la zona. Menuda corrupción e inutilidad de instituciones, plegadas al poder y al dinero.

    • No todo el mundo vive del turismo ni del paisaje.Yo creo que ha de haber un poco de todo .Si queremos tener internet nos están llenando las fachadas de cables y cajas para tener fibra.Queremos electricidad habrá que poner postes .Queremos comodidades pero en mi fachada no en la del vecino

    • Parece licita vuestra reclamación, pero si fueseis un poco más amplios de miras y empáticos se podria hacer la misma petición para todos los pueblos del Matarranya o incluso de otras Comarcas vecinas, incrementando exponencialmente la cantidad de firmas y manteniendo la legitimidad de la propuesta.