María Goikoetxea: «Nos preocupa que hay muchas menos llamadas para denunciar desde que comenzó el estado de alarma»

Estamos llevando esta situación como podemos, intentando sacar adelante todos los proyectos. Seguimos manteniendo activas todas nuestras asesorías, los teléfonos 900 504 405, que son los de emergencias, y también todos nuestros recursos habitacionales. Las asesorías se están haciendo de manera telefónica pero siempre estamos un equipo de emergencias por si hay algún caso en el que tengamos que intervenir de forma presencial.

Sí. Estamos trabajando en diferentes líneas. La primera está dedicada a esas personas que están viviendo una situación de emergencia ahora, para las que les garantizamos una alternativa habitacional.  Estamos trabajando en la línea también de lo que habrá después: somos conscientes de que esta crisis sanitaria va a derivar en una crisis económica y social y hay mujeres pues que se van a ver más golpeadas por esta situación. Entonces es nuestra obligación ir adelantando recursos para ir solucionando estos posibles casos que saldrán más adelante.

Así es. El juzgado de violencia sigue funcionando, la policía sigue trabajando con todo lo relacionado con dar cobertura a las mujeres víctimas de violencia de género. Esto es muy importante que quede claro y llegue al máximo número de mujeres posible.

El problema que tenemos es de una magnitud enorme. Es un problema social, no de las mujeres. Nos afecta a todas y a todos. Lo que estamos observando con un poco de preocupación es que se ha decretado el estado de alarma no está habiendo el mismo flujo de llamadas que había previamente. Esto significa que hay muchas que no se están produciendo porque las mujeres se encuentran junto a su agresor las 24 horas del día. Por eso es un buen momento para pedir la colaboración ciudadana. En nuestras casas podemos escuchar, podemos saber que a nuestro lado de la pared se está produciendo una situación de violencia, y tenemos que levantar el teléfono y llamar a la línea 900 504 405.

Tenemos el teléfono 900 504 405 que se mantiene operativo las 24 horas, activa todos los protocolos y activa a las compañeras y educadoras para que hagan los seguimientos y que esas mujeres no se sientan solas en ningún momento.

Mantenemos también todos nuestros dispositivos habitacionales. Hemos reforzado nuestros recursos y ampliado plazas tanto en Zaragoza como en Huesca y Teruel para que si una mujer sale de su casa porque está siendo víctima de violencia en este momento de aislamiento pueda hacerlo. Para que nadie se quede en la calle.

Esta situación lo que va a provocar es que tengamos que centrar muchísimos más esfuerzos en la detección y en la prevención mientras estemos en este estado de alarma. Pero también hay que poner el foco en el después, ya que van a venir unos meses en los que vamos a tener que trabajar para garantizar que estas mujeres que están en procesos de recuperación no vuelven a quedarse atrás.

Sí, seguimos en contacto con todos los agentes de esa red y seguimos manteniendo los protocolos de sanidad para evitar contagios y posibles focos. En la manera de lo posible intentamos hacer todo vía telemática pero se siguen prestando servicios de forma presencial si los casos lo requieren.

Se está viendo que esto no es así. Las cifras son las que son: estamos viendo en este momento cómo evolucionan los que se contagiaron la semana previa del 8M. Creo que es una forma más de intentar criminalizar al movimiento feminista que tanto ha luchado y que tantos derechos ha conseguido para todas las mujeres. Esto, desgraciadamente, lo vamos a seguir viendo durante toda la legislatura.