Un vertido con espuma muy espesa en el río Guadalope en Alcañiz hace saltar las alarmas entre los vecinos de San Antonio

Una espesa capa de espuma cubrió ayer buena parte de la ribera hasta el cauce del río Guadalope en Alcañiz desde la desembocadura del escorredor del Mangón ubicado junto al arco. La situación vivida a primera hora de la tarde de este martes no es nueva en el vecindario del camino de San Antonio de Alcañiz aunque quizá sí es una de las más aparatosas.

«Hoy ha sido un vertido con muchísima espuma pero son frecuentes los malos olores a goma quemada o purines, además de vertidos también de espuma pero en menor cantidad o aceites, entre otras cosas… Suelen darse a horas muy concretas como las cinco o seis de la mañana y, salvo quienes salimos a trabajar temprano, nadie se da cuenta. Sobre todo, en verano y en invierno son las épocas en las que más se dan estas situaciones». Esta es la queja de varios vecinos de las casas que dan a la ribera y este martes no daban crédito a la cantidad de espuma que salía del Escorredor. Se trasladó aviso a Guardia Civil y Policía Local y en otras ocasiones también se ha alertado pero «a lo que ha llegado alguien -cuando han venido- ya no hay olor ni restos y es muy difícil de demostrarlo. En verano el olor a purín es tan fuerte que nos llega a despertar y suele darse en momentos acotados, a veces empieza a las tres de la madrugada y para a las seis». Esta situación se ha puesto en común entre varios propietarios y han elevado sus quejas en otras ocasiones tanto por los vertidos y olores como por la limpieza de las riberas.

«Nos remiten a poner una instancia y es muy lento. Hasta hace muy poco tiempo hemos estado años y años solicitando la limpieza de la ribera porque con la maleza trepan ratones, ratas, culebras y de todo… nada saludable hasta las viviendas. También vienen visitantes a Alcañiz que quieren hacer un recorrido y se dan la vuelta porque las riberas están impracticables», denuncian. Al final, añaden, «es la batalla de siempre entre administraciones y los unos por los otros, los afectados somos los vecinos que tenemos que soportarlo».

El arreglo del escorredor del Mangón, una reivindicación ya histórica

El escorredor del Mangón llega hasta el camino de San Antonio tras un recorrido largo desde la zona del polígono la Laguna junto a la carretera de Zaragoza pasando por zonas de cultivo, empresas de variada actividad y viviendas. Su función natural hace dos siglos era drenar la zona de La Laguna (ahora polígono y que con la borraca Gloria quedó inundado) y con la puesta en marcha hace unos años de los nuevos regadíos del Canal Calanda-Alcañiz, se hicieron necesarias dos escorrentías, una hacia el camino de Castelserás y otra en el Escorredor del Mangón que recoge aguas de todo tipo, también las derivadas de tormentas.

Esta infraestructura se quedó pendiente de ampliar y de entubar, unos trabajos costosos ya que determinadas zonas presentan un acceso complejo. En los últimos meses se han celebrado varias reuniones para tratar de dar solución y la intención que expresan desde el Consistorio es suscribir un convenio entre Ayuntamiento, Confederación Hidrográfica del Ebro (CHE) como organismo que posee la competencia, y los regantes, ya que suya es la responsabilidad como usuarios. Habría que limpiarlo en profundidad, hacer el entubado y llevar una tubería de desagüe a la depuradora.

Del vertido de este martes ninguna de las tres administraciones, con las que ha contactado La COMARCA, tenía constancia.