El club afronta una deuda con Hacienda de 430.000 euros y necesita inversión
El Andorra CF tal y como lo conocemos podría estar disputando los últimos partidos de su historia. La situación del club es límite (en invierno se ha jugado por la mañana porque cortaron la luz del Endeiza) y el riesgo de desaparición se acrecienta día a día. La entidad acumula una deuda de 430.000 euros con Hacienda provocada por la anterior junta directiva y se necesita inversión como el comer para encauzar el futuro. La junta gestora, que se hizo cargo del club en julio para al menos poder iniciar la temporada, comunicó a los socios la situación en la última asamblea.
En estos momentos la continuidad del Andorra pasa única y exclusivamente por una inyección de capital. Los socios dieron el visto bueno a realizar la tasación de todos los inmuebles del club para que la junta gestora pueda negociar una rehipoteca con los bancos. En caso de que esta opción no saliera adelante la única alternativa sería vender el club, algo que solo sucedería si los ingresos fueran suficientes para sanear las cuentas. Si no, el Andorra CF se vería abocado a la desaparición.
«La situación es muy delicada. Si Hacienda nos embarga desaparecen todos los inmuebles, los pasivos y activos que tuviera el club. El Andorra como tal desaparecería y habría que empezar de cero con otros estatutos y una refundación», explicó el presidente de la junta gestora, Antonio Donoso, que recordó que la única finalidad de este organismo cuando se creó era «limpiar el club económicamente». El mes en el que nos encontramos es clave para dirimir el futuro de la entidad, ya que Hacienda aprieta y el Andorra trata de ajustarse a los plazos.
La plantilla, comprometida
Quizá la única buena noticia ante la incertidumbre que vive el Andorra CF es el compromiso manifiesto de la plantilla. A día de hoy el club está al corriente de pago con jugadores y cuerpo técnico, pero esto podría cambiar en breve si la situación no mejora. De hecho, ya se ha comunicado a los jugadores que hay opciones reales de que no cobren lo correspondiente a estos tres últimos meses de la temporada. «Ellos lo asumen tal cual y han dicho que continúan. Algunos tenían ofertas para salir pero dijeron que no, que están comprometidos y que van a dar la cara hasta el final», explicó el presidente de la junta gestora.
El futuro no es en absoluto alentador para un club que hace apenas ocho temporadas jugaba en 2ªB. Toca esperar acontecimientos y confiar en una rehipoteca o la llegada de un inversor capaz de revertir la situación.
Durante muchos años,el segundo club de Aragón. Y el mejor fútbol año tras año. Sería una gran pena!!!