De muchos es sabido que las teorías de los «Trascendentalistas», ese grupo de intelectuales entre los que se encontraban filósofos y escritores como Emerson, Thoreau o Whitman, marcó profundamente el pensamiento norteamericano durante varias generaciones. Tanto fue así que, al poco tiempo de las publicaciones de sus primeros libros ya surgieron intentos de experiencias, individuales o en grupo, de orientar la vida siguiendo los postulados de dicho movimiento: rebeldía ante el incipiente capitalismo, existencia autosuficiente en la naturaleza, etc… -todavía hoy en día siguen publicándose libros que nos cuentan las vivencias de gente que, con un «Walden» bajo el brazo, se van a los bosques a vivir aislados de la civilización.
Pues bien, dos de esas experiencias, una real y otra literaria, es lo que hoy os traigo para cerrar esta temporada. Dos libritos curiosos y entretenidos, firmados por dos de las escritoras más interesantes de las letras norteamericanas; y editados por Impedimenta, como siempre primorosamente.
El primero lleva por título «FRUITLANDS», y cuenta la historia real de un matrimonio y su hija que fundan, junto con otros utopistas, una comuna en plena naturaleza a finales de 1840. Los principios que debían regular la vida de este grupo de intelectuales eran el pacifismo, la justicia, el veganismo, el rechazo frontal al dinero, etc… Todo parecía sencillo y amigable en ese bosque lleno de buenas intenciones. Pero el caso es que el entusiasmo inicial chocó violentamente con la realidad: la falta de nociones agrícolas y de pastoreo, junto con la ausencia de técnicas necesarias para sobrevivir al crudo invierno de Nueva Inglaterra, hizo que aquella experiencia utópica durase apenas un año.
Sin embargo, ese sueño de hacer realidad lo irrealizable debió de marcar profundamente a la pequeña Louisa, que entonces contaba diez años, para escribir 30 años después, convertida ya en LOUISA MAY ALCOTT -aclamada autora de «Mujercitas»-, un relato narrando la estancia de la familia en la comuna. Es un relato breve, apenas 40 páginas, pero delicioso y con mucho sentido crítico. Una pequeña joya de una de las mujeres más independientes de su tiempo.
La segunda obra que os propongo se titula: «EL OASIS», una controvertida y deliciosa novela utópica de la novelista y crítica norteamerica MARY McCARTHY (1912-1989), la joven e inteligente escritora cuya mordacidad se hizo legendaria en las fiestas literarias de los intelectuales de izquierdas. La obra causo un auténtico escándalo en su tiempo, ya que McCARTHY, más ácida que nuca, se inspiró, sin casi disimulo alguno, en sus amigos, amantes y conocidos, grandes personalidades de la cultura estadounidense, para plasmar un irónico retrato de la esfera intelectual de izquierdas de su época.
Ese «Oasis» es una comuna que, a finales de los años 40, un grupo de intelectuales urbanitas de izquierdas deciden crear en las montañas de Nueva Inglaterra, y que bautizan muy apropiadamente como «Utopía». En realidad, lo que todos desean es llevar a la práctica sus firmes ideales marxistas. Sin embargo, pronto surgirán la discordia y el cisma ideológico entre las dos facciones que se forman del grupo: los utópicos puristas y los realistas. Discordias que se irán agravando hasta desembocar en un desenlace desastroso.
Una sátira descarnada y certera sobre los sueños y las decepciones de toda una generación, narrada con una prosa eléctrica y vibrante quer hace de esta novela «una auténtica delicia, una pequeña obra maestra», como dijo Hannah Arendt.
Bueno, pues aquí os dejo con estos dos pequeños bocados literarios de auténtico gourmet. Hasta la temporada que viene.
Miguel Ibáñez. Librería en Alcañiz