Tuvo lugar el tradicional cambio de reina del club cuyo nombramiento recayó en Irene Adán
Más de 400 personas participaron en la noche del pasado sábado en la fiesta y cena de fin de temporada del Alcañiz Club de Fútbol.
El evento se celebró en el frontón cubierto y contó con la presencia de muchos de los jugadores de todos los equipos que conforman el organigrama del club alcañizano, además de técnicos, delegados, socios y aficionados. La representación institucional estuvo a cargo del alcalde de Alcañiz, Ignacio Urquizu y de la concejal del PAR, Berta Zapater.
Tras la animada cena tuvo lugar el traspaso de poderes entre la reina saliente del club, Sonia Ramos y la entrante, Irene Adán. Ambas dedicaron unas palabras a los presentes que las acogieron con fuertes aplausos. En la imposición de la banda estuvieron acompañadas por Claudia Espés, reina de la Peña Taurina, Pilar Mateo reina de la Asociación Aragonesa El Cachirulo Teresa Salvo y por Rosi Cheres, reina de la Asociación de Rumanos del Bajo Aragón.

Una vez concluido el acto protocolario se rindió homenaje a todos los equipos pero en especial al primer equipo por la gran temporada realizada y a aquellos que habían logrado algún campeonato o trofeo. En este caso pasaron por el escenario el benjamín B campeón de la liga de su categoría, el benjamín A como campeón de la Copa Federación, el infantil A como subcampeón de la Copa Federación, el cadete A como campeón de liga y haber conseguido el ascenso a División de Honor y al alevín que ha competido en la difícil categoría alevín. Asimismo recibieron los aplausos de todos los aficionados Iker Monteiro y Tomás Ribero que han sido nombrados por la Federación Aragonesa de Fútbol como los mejores jugadores de la provincia de Teruel en sus respectivas categorías. También hubo tiempo para visionar un montaje audiovisual realizado por Marta Domingo y Joaquín Tello con algunos de los mejores goles conseguidos por el primer equipo durante la pasada temporada.
Una vez finalizado estos actos la fiesta se adueñó del pabellón hasta altas horas de la madrugada, una fiesta que se vivió con hermandad demostrando una vez que el Alcañiz Club de Fútbol es una gran familia en la que todos, de una u otra manera, son importantes.