Con el encendido de sus árboles y decoraciones en las dos localidades arrancó ayer la campaña navideña
Calanda y Alcorisa ya brillan con las luces navideñas. En las dos localidades bajoaragonesas sus plazas y calles tienen desde ayer un color especial y diferente al resto del año.
En Calanda el encendido del árbol de Navidad que preside la Plaza de España tuvo lugar a las ocho de la tarde. Tras la cuenta atrás entonada por las decenas de niños y niñas que se dieron cita en la céntrica plaza, las luces del árbol resplandecieron en la fría noche calandina. Pero no fue solo el encendido del árbol lo que despertó el espíritu navideño de los calandinos. En un especial photocall instalado para la ocasión, los más pequeños se divirtieron en compañía de sus amigos y de sus padres. Por otra parte no faltó el chocolate cocido, ni los roscones que pusieron a la venta los estudiantes del instituto con la finalidad de recoger dinero para sufragar los gastos de su viaje de estudios. Hasta 400 raciones de chocolate, 80 roscones y 150 ramilletes de la buena suerte se distribuyeron entre los asistentes al acto. Por su parte la la Asociación Calandina de Comercio, Industria y Servicios repartió polvorones y moscatel.
En Alcorisa también dieron el pistoletazo de salida a la Navidad con el encendido del árbol en la plaza nueva, cuyos adornos donaron los usuarios de ATADI. El acto, organizado por la Asociación de Comerciantes, estuvo amenizado por la Coral infantil y la Polifónica. Para entrar en calor se repartió chocolate.
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