DGA presentará ante el Ministerio los proyectos de las cuatro balsas de almacenamiento hídrico pendientes
El Gobierno de Aragón buscará en la Comisión Bilateral Aragón Estado el compromiso para la construcción de las cuatro balsas con las que completar la regulación de los ríos Matarraña, Algars y Tastavins. Así lo confirmó el consejero de presidencia Vicente Guillén en su visita ayer a la sede de la Junta Central de Usuarios de la Cuenca del Matarraña.
El objetivo del encuentro era conocer el estado administrativo en el que están las cuatro infraestructuras demandadas. Las balsas de Val de Betrán y Val de la Figuera ya cuentan con todos los informes de impacto ambiental. Ambas almacenarían 7 hectómetros cúbicos y están presupuestadas en 14 y 26 millones respectivamente. Además se incluirían las balsas de Comellares, que regularía el Tastavins y la balsa de Serrat, ubicada en el término municipal de Cretas y que afectaría al Algars, ambas pendientes de aprobación del proyecto.
Para Guillén lo esencial es presentar ante Madrid un proyecto conjunto en el que exista un compromiso de ejecución de todas infraestructuras. «Lo que queremos transmitirle al gobierno central es que estamos ante un proyecto conjunto y que se deben construir todas. Para ello nosotros debemos agilizar los trámites administrativos que, en algunos casos, están más avanzado que en otros», explicó. Guillén alabó, además, el trabajo y el consenso conseguido en la zona y calificó estos proyectos «como un ejemplo de desarrollo sostenible del agua». Actualmente ya funcionan las balsas laterales de Valcomuna y La Trapa en Maella, de 2 y 1 hm3 respectivamente, inauguradas en 2005 y cuya gestión y explotación está resultando un éxito.
Por su parte, José María Puyol, presidente del Sindicato de la Junta Central de Usuarios del Matarraña anunció que han enviado un escrito a la Comisión de Agricultura del gobierno central para que conozcan in situ el proyecto. El documento ha sido presentado por las tres comunidades autónomas afectadas, Aragón, Cataluña y Comunidad Valenciana, y firmado por los 27 municipios implicados. «Queremos que vengan y vean el proyecto, el trabajo de tantos años de realizar unas infraestructuras sostenibles. Además de abrirnos las puertas de Europa», afirmó.
Asimismo, Guillén visitó la localidad de La Fresneda donde se le planteó la necesidad de actuar en los accesos por carretera de la localidad, actualmente el casco urbano cuenta con 3 accesos en la carretera A-231 que no cuentan con apenas visibilidad y que suponen una elevada peligrosidad.
La visita se completó con una reunión con la directiva del Grupo Arcoiris en Valderrobres donde conoció de primera mano las expectativas de crecimiento para 2017 y donde alabó, del mismo modo, la «proyección» del grupo agroalimentario.