La Guardia Civil continúa investigando un posible intento de secuestro de un menor de 10 años en Escatrón. Los hechos ocurrieron el pasado sábado por la tarde, 16 de enero, cuando el chico caminaba solo por la calle. Según relata la propia víctima, se le aproximó una furgoneta negra, ya de noche, en la que iban dos hombres, los cuales le invitaron a subir al vehículo.
Tras la negativa, la furgoneta continuó persiguiéndolo por las calles de la localidad y en una ocasión uno de los ocupantes bajó y lo siguió a pie. En ese momento el niño decidió correr e incluso le tiró piedras. Consiguió llegar a casa sano y salvo, y contó lo que le había sucedido a su familia, que no dudó en denunciar en ese mismo momento.
«No hay derecho a que a mi hijo le de miedo ir por la calle de su pueblo él solo, esperamos que esto solo sea el miedo porque acaba de suceder y lo vaya superando, pero ha sido un susto muy gordo para él», explica la madre del niño.
Fuentes policiales confirman que hay una denuncia aunque todavía «están estudiando la veracidad de los hechos». En este sentido, la policía judicial se va a personar esta misma semana en el domicilio del niño para volver a escuchar todo lo acontecido.
El suceso tuvo lugar en una calle muy transitada y céntrica del municipio, cerca del conocido restaurante Los Arcos, frente a la gasolinera ubicada en la calle Monesma Quílez. «Hay preocupación desde el Ayuntamiento de Escatrón en cuanto a este tema, nunca había pasado nada parecido en la localidad, no podemos hacer otra cosa que dejar trabajar a la Guardia Civil», explica el alcalde de Escatrón, Juan Abad.
Los ayuntamientos de los pueblos de los alrededores, en la zona de la Ribera Baja del Ebro, alertaron durante los días posteriores a los vecinos sobre este incidente. La Guardia Civil por su parte ha reforzado la vigilancia por toda esta zona.