Salud Pública no notificó este jueves ningún caso nuevo de coronavirus en el Bajo Aragón-Caspe, comarca que el martes retrocedió a la fase 2 de la desescalada sumándose así a las oscenses del Bajo Cinca, Cinca Medio y La Litera por los rebrotes entre trabajadores del campo.
Actualmente, hay 26 casos positivos en la comarca y nueve de ellos fueron trasladados este jueves al Convento de Santo Domingo, donde el Ayuntamiento ha habilitado un espacio para que puedan estar aislados de forma segura ya que residen con otras personas en sus domicilios. Siete de ellos viven en Caspe y otros dos en Chiprana. Se está a la espera de los resultados de las pruebas realizadas a 15 personas sospechosas por lo que en los próximos días el convento podría albergar a más personas de ambas localidades.
Desde que se detectó el primer positivo se han estudiado todos los contactos de las personas con coronavirus y a todos ellos se les ha realizado la prueba PCR desde el Centro de Salud de Caspe. Este test se complementa con una prueba serológica para contar con una «fotografía más real» de cada caso. Así se puede saber con seguridad si una persona tiene el coronavirus, ya lo ha pasado o si está libre del virus. Desde este jueves la labor del Centro de Salud se ha visto reforzada con la incorporación de dos enfermeras que van a ejercer el papel de «rastreadoras» de los casos sospechosos y todos sus contactos.
Los nueve positivos fueron llegando en una ambulancia al Convento de Santo Domingo. El coordinador del Centro de Salud de Caspe, Miguel Guiu, agentes de Policía Local y representantes municipales estuvieron presentes durante el traslado. En el edificio se encuentran preparadas habitaciones dobles e individuales, previamente desinfectadas por la brigada, con capacidad para 22 personas. Todas están equipadas con baños privados, armarios con utensilios básicos y alimentos no perecederos.

Además, Servicios Sociales de la Comarca les proporciona el servicio de comidas diario, del que se encarga Bar España Kebab. El dueño del negocio les dejará la comida para llevar en la planta calle para no tener ningún contacto. Tanto agentes de Policía Local como Guardia Civil estarán patrullando alrededor del edificio día y noche hasta que no quede ningún aislado en el interior y se desinfectarán las habitaciones y espacios comunes diariamente.
Este viernes se les practicará a los nueve aislados la prueba de Inmunoglobulina G (Ig G) para saber si tienen anticuerpos, lo que significaría que ya han pasado la enfermedad y que no hay peligro de que contagien a otras personas.
La comarca retrocedió el martes a la fase 2 al constatarse seis positivos con prueba PCR a los que se sumaron el miércoles otras 15 nuevas notificaciones. De los 26 casos, siete residen en la capital en una misma vivienda en la que, aunque sí podían estar aislados en sus habitaciones, debían compartir espacios comunes como el baño (página 3).
El resto, 19, son contactos directos que se han investigado de dos casas de Chiprana en los que se detectaron cuatro positivos hace unos días. Es decir, que se les realizó pruebas porque son contactos de los moradores de dos viviendas en las que en las jornadas anteriores se habían detectado cuatro casos, dos en el domicilio de un matrimonio con hijos y otros dos en una casa en la que residen una veintena de personas. Todos ellos corresponden a un mismo perfil: son hombres jóvenes, trabajadores temporales de la campaña frutícola en varias fincas de la comarca.
«Creo que hemos tenido una actuación rápida. Ha sido una actuación pertinente para la que hemos contado con la colaboración tanto de las comarcas, alcaldes y, desde luego, de los servicios sanitarios de todos centros de salud de las zonas», apuntó el miércoles la consejera de Sanidad, Sira Repollés. La caspolina realizó su primera visita oficial a su localidad natal para conocer y agradecer de primera mano el trabajo del Centro de Salud y las instituciones. Antes que en la Ciudad del Compromiso estuvo en los centros de salud de las otras tres comarcas afectadas: Fraga, Binéfar y Monzón.
El retroceso a la fase 2
A la preocupación sanitaria se le unió desde el primer momento la social y económica con el regreso a la fase 2. En la práctica supuso una limitación de aforos en comercio y hostelería de entre un 40-50% y la recomendación-DGA no tiene potestad para prohibir- los desplazamientos dentro y fuera de la comarca si no son extrictamente necesarios.
«Debemos hacer todo lo que esté en nuestra mano para superar esta situación cuanto antes y volver a esa nueva normalidad que estábamos empezando a disfrutar. Este regreso a la fase 2 lo preveíamos desde el inicio de la campaña frutícola y ya estábamos preparados para ella, aunque no es de buen gusto para nadie, vamos a poner todos los medios necesarios para superar este problema», afirmó la alcaldesa de Caspe, Pilar Mustieles.
Los alcaldes de los seis pueblos del Bajo Aragón-Caspe se reunieron de manera inminente en cuanto conocieron la noticia de que retrocedían a la fase 2. El objetivo: unir fuerzas. Concretaron que los seis ayuntamientos se ponen a disposición de Salud Pública para coordinar todas las actuaciones de protección para la población, informar sus vecinos de las medidas que se van a llevar a cabo, se intensificar las desinfecciones de todas las calles de los municipios, y reforzar el servicio de Policía y Guardia Civil de la zona.
«Nos comprometemos a seguir todas las recomendaciones que nos transmitan desde Sanidad para superar esta situación cuanto antes», subrayó el martes en la reunión el presidente, Joaquín Llop.
Una de las principales preocupaciones que compartieron los seis representantes municipales, además de la situación sanitaria, es la empresarial.
«Estamos seriamente preocupados por lo que pueda ocurrir con las cooperativas y empresas hortofrutícolas. Nos encontramos ante un problema de grandes dimensiones y que parece que se va a dilatar porque el campo debe continuar con el trabajo de la recogida de la fruta y son muchas las personas implicadas», explicó el presidente de APEC, José Vicente Sancho.
Buenos días. Me parece muy bien, sanidad está actuando como tiene que ser, todos los protocologos a seguir y se merecen toda la admiración y respeto. Y a estas personas que vienen a trabajar que a quien corresponda, los tenga en las condiciones laborables, higiénicas, que no estén acinados en viviendas tantas personas viviendo de cualquier manera. Y a estas personas también que respeten las normas que se han mandado, que no estén por la calle sin mascarilla, y eso hace muchos días que se estaba viendo. Como no pongamos cada uno de nuestros parte esto va a ir a peor.. pero claro siempre están los que parece que para ellos nova la cosa.. pues estamos todos expuestos..así que a tener cuidado todos.. y los jóvenes que tengan más respeto y pongan de su parte también..