La Asociación Amigos del Castillo del Compromiso realizó un acto reivindicativo en la capital aragonesa
Una cloaca infecta, una emergencia social y hasta un atentado. Así ha calificado la Asociación de Amigos del Castillo del Compromiso la situación en la que se encuentra el cauce del río Guadalope. Un año después de que empezase su lucha, la agrupación ha vuelto a reivindicar una mejora, mientras las administraciones públicas parece que hacen oídos sordos.
En este mes de marzo se cumple un año desde que la Asociación de Amigos del Castillo comenzó a alzar su voz como colectivo para recuperar el cauce del río Guadalope. Tras el Bajo Aragón, Zaragoza ha sido el escenario que ha elegido la agrupación para lanzar sus reivindicaciones y presentar las acciones que está llevando. Y más concretamente, el lugar elegido ha sido la sede de los medios de comunicación en la capital aragonesa: La Asociación de la Prensa Aragonesa.
Entre otros mensajes, los Amigos del Castillo calificaron la situación actual de atentado y de emergencia social, no sólo para Caspe sino también para todo Aragón. «La recuperación del cauce es algo urgente y no puede delatarse más, no queremos que nuestros hijos y nietos se críen cerca de una cloaca queremos un entorno vivo y saludable porque Caspe lo merece», manifestó el presidente de la Asociación de Amigos del Castillo, Alfredo Grañena.
«Hemos conseguido hacer llegar nuestro mensaje a donde interesaba: al Ministerio de Medio Ambiente, a la Confederación Hidrográfica del Ebro, y lo más importante, a la gente», explicó Antonio Espinosa, uno de los miembros de la Asociación.
El colectivo ya ha recolectado, a día de hoy, alrededor de 3.500 firmas para apoyar su lucha y conseguir la recuperación de ese cauce. Además, la Asociación de Amigos del Castillo se define como un colectivo persistente, por eso ha anunciado que si no reciben una solución concreta a este problema, no descartan llegar a instituciones europeas denunciando la stiuación. «Preferimos esperar que el ministerio nos dé una respuesta, pero ese será el siguiente paso si esto no se desbloquea», avisó Grañena. «Lo único que nos falta es que corra agua en el río Guadalope, y lo vamos a lograr», afirmó el presidente.