La localidad celebrará el sábado su hoguera en honor a San Valero pero el pasado fin de semana ya preparó parte de la estructura
Mientras que la mayoría de los pueblos de la zona recogen ya las cenizas de las hogueras del pasado fin de semana, Castelnou todavía no ha prendido la suya. Eso sí, sus vecinos ya se han encargado de comenzar a prepararla. Un gran «nido» de ramas y troncos aguarda desde el pasado sábado en el lugar que ocupará el próximo fin de semana la hoguera en honor a San Valero.
En torno a una veintena de vecinos, la mayoría hombres, se encargaron de montar parte de la estructura y cumplir con su función en el «día de la leña». Pero no está todo hecho, falta la parte más característica de la hoguera de Castelnou: la copa. El próximo sábado tocará trabajar de nuevo. Por la mañana será el momento de ir a buscar el pino, cuya parte alta se alzará en medio de la fogata.
Según cuenta una vecina de la localidad, anteriormente la festividad se celebraba el mismo día del Santo, que este año cae en martes, pero hace algunos años se decidió pasarlo al fin de semana para que más gente pudiese acudir. «Esto antes era un hervidero de gente», apuntó mientras contemplaba a los vecinos.
El fuego también estuvo presente durante la preparación de la hoguera. Los encargados del montaje encendieron una pequeña fogata en una esquina para poder calentarse y reponer fuerzas.
El próximo sábado a las diez y media de la noche se procederá a encender este entramado de ramas para deleitar a los vecinos con uno el acto más característico de las fiestas de Castelnou, que cada año atrae a numerosos visitantes de pueblos vecinos.