En el CECOR trabajan los responsables implicados en que todo transcurra con normalidad. Tienen previstos todos los escenarios de posibles incidencias
Entrar en el CECOR es acceder una especie de «gran hermano» de Motorland. Es una mente que todo lo ve y todo lo organiza y dispone para que el Gran Premio de Aragón transcurra con normalidad. De hecho, acon la prueba mundialista de este año todavía en caliente, ya están pensando en el de 2019.
El CECOR es un órgano general de coordinación en el que se reúnen representantes de las administraciones y agentes implicados. «Recibimos la información de todo tipo de incidencias e inmediatamente se le traslada a los responsables para que desplieguen a su equipo y que se intervenga en el menor tiempo posible», explica Enrique Gómez, secretario general de la Subdelegación del Gobierno en Teruel. El centro está integrado por el Gobierno Central (Guardia Civil y Policía Nacional); DGA (112, Protección Civil y el Salud); Diputación de Teruel (Bomberos); Policía Local de Alcañiz y la gerencia del circuito. Su actividad comienza el viernes a las ocho de la mañana y termina el domingo cuando sale el último visitante.
Mediante pantallas y por vía telefónica y radio llegan al CECOR todas las incidencias del circuito e inmediaciones. Para todas ellas están preparados mediante el protocolo de seguridad, un documento que se aprueba anualmente y que se trabaja en las juntas previas al GP en las que se reúnen todos los agentes implicados y en los despachos. Este año la principal novedad es que se ha instalado un puesto sanitario avanzado preparado para atender una gran emergencia en Technopark, más grande que el de años anteriores en Motorland y con mejor conexión con las vías de salida; y la coordinación de todo el personal de Protección Civil para, en caso que hubiera sido necesario, activar un plan especial con todas las garantías.
Todo lo que pueda ocurrir en el circuito está planificado y tiene su protocolo, desde un esguince de tobillo a un ataque terrorista (España se encuentra en alerta 4). Normalmente suelen actuar en pequeños sucesos aunque hay que estar preparados para todo tipo de situaciones. «Fundamentalmente lo que tenemos son pequeños accidentes en los accesos como alcances de vehículos y caídas de motos; e incidencias en las entradas a las gradas como tropiezos, caídas, torceduras de tobillo y en estos días de altas temperaturas, algún golpe de calor o deshidratación», precisa Miguel Ángel Clavero, jefe de Seguridad y Protección Civil de Aragón. Tienen controlados todo tipo de escenarios. Desde los riesgos naturales (viento, lluvia, tormenta o granizo) a incendios forestales, sucesos provocados por la gran cantidad de personas que se encuentran en el circuito (caída de las gradas o atropellos), acciones propias del circuito (deflagraciones por la gran cantidad de combustible) y atentados terroristas.