Tras perder el equilibrio la víctima se ha precipitado al fuego quedando calcinado
Un hombre de 86 años, S.G.C, residente en Zaragoza, falleció ayer cuando realizaba una quema de rastrojos en Caspe. Los hechos ocurrieron en torno a las 15.55 horas, cuando esta persona se encontraba con su mujer realizando una quema en una finca de frutales en el paraje de Val De Zail, una zona que se encuentra a unos 7 kilómetros de Caspe y que conecta el núcleo urbano con la Zaragoceta. La envergadura de las llamas y el complicado acceso al lugar motivaron que las autoridades no pudiesen hacer nada por salvar su vida y, en estos momentos, se está a la espera de que la autopsia revele qué fue lo que motivó el fallecimiento de esta persona, tal y como confirmó Juan Manuel Galbarro, comandante del puesto de la Guardia Civil de Caspe.
Los primeros datos apuntan a que el hombre se precipitó y acabó cayendo al fuego por causas que se desconocen. La mujer, ante lo sucedido, intentó socorrerle pero, finalmente, no pudo hacer nada por salvar su vida. Únicamente pudo avisar a las autoridades de emergencia, que acudieron al lugar de los hechos tras el aviso del 112. En concreto, se desplazaron Bomberos del Parque de Caspe, Bomberos, Protección Civil y miembros del Ayuntamiento de Caspe.
La mujer, que había inhalado grandes cantidades de humo y estaba en estado de shock, tuvo que ser trasladada al centro de salud de Caspe. Según fuentes sanitarias, no presentaba quemaduras ni heridas de gravedad, por lo que fue dada de alta ese mismo día.
Por el momento, el cuerpo del hombre ha sido trasladado a la Sala de Autopsias de Caspe. Según fuentes de la Guardia Civil, habrá que esperar a conocer los resultados de la autopsia para determinar con exactitud cuáles han sido las causas de la muerte del fallecido.