Llegar al puesto 250 de la WTA (Women’s Tennis Association), el ranking internacional de tenistas. Ese es el objetivo de la caspolina Irene Burillo después de haber conquistado el pasado fin de semana el torneo ITF Rome Georgia disputado en Atlanta.
La bajoaragonesa se impuso en la final a la norteamericana Grace Min por dos sets a uno ( 6-1, 6-7 y 1-6) en un enfrentamiento en el que Irene fue de menos a más y al que nunca le perdió la cara. Para llegar a la final de esta importante competición, la caspolina eliminó en semifinales a la mexicana Ana Sofía Sánchez por dos sets a uno (5-7, 6-2 y 7-5). Este torneo repartía en premios un total de 60.000 dólares entre las 55 participantes, con lo que al lograr el triunfo Irene se ha embolsado la mayor cantidad, algo más de 9.000 dólares.
Gracias a esta victoria en Atlanta, Burillo sumó una buena cantidad de puntos que le ha llevado a ascender hasta el número 269 con lo que se sitúa por primera vez en su carrera como tenista entre las 300 mejores jugadoras del ránking WTA, posición que a partir de ahora le ayudará a aspirar a disputar torneos de mayor envergadura con la vista puesta en entrar entre las 250 mejores tenistas del mundo. Esto le permitirá jugar las previas de los torneos de Grand Slam, como por ejemplo el conocido Roland Garros.
El triunfo permite a la aragonesa alcanzar su mejor ranking personal y sumar el tercer título profesional de su carrera en siete finales disputadas. Hacía más de tres años que Burillo logró su último éxito en Vinaros (2017), después de estrenar el palmarés profesional en Castellón (2015). La última final la había alcanzado en 2019 en el torneo rumano de Arad, y el pasado año solo destacó en el torneo de 25.000 dólares de Vera Beach, también en Estados Unidos, llegando hasta los cuartos de final.
«Estoy en un momento muy bueno. No ha sido nada fácil llegar hasta aquí, ha supuesto mucho trabajo duro», explica Irene Burillo. «Además, ha sido complicado ponerse al día después de todo lo que sucedió el pasado año 2020 con la pandemia: tuvimos que suspender entrenamientos, competiciones… Bajamos el ritmo, pero ahora de nuevo estoy en plena forma».
Burillo recuerda cómo a comienzos del pasado año tuvo que volver a su pueblo natal, Caspe, para confinarse junto a sus padres y sus hermanos. Allí, se las ingenió para continuar en forma con ejercicios que le iban enviando desde la Academia de Tenis, Ad in, a la que pertenece desde hace 3 años. «Llevo 30 días sin coger una raqueta dentro de una pista y poder jugar al tenis. Nunca había estado más de 10-15 días sin pelotear. Aunque haga los ejercicios no es lo mismo. Es muchísimo tiempo para un deportista profesional», aseguraba la tenista.
Actualmente los partidos de tenis se juegan sin público, solo pueden acceder a la pista entrenadores y preparadores, y deben hacerlo con mascarilla, únicamente pueden quitársela los jugadores cuando están en pleno partido. Además, deben hacerse pruebas PCR regularmente para viajar y participar en las distintas competiciones.
«En España sin duda están las restricciones más duras, aquí en EEUU hay lugares que la gente incluso no tiene la obligación de llevar mascarilla», cuenta la tenista. Si diera positiva en coronavirus sería un problema, ya que se paralizaría de nuevo toda la temporada deportiva y entrenamientos.
Tras el confinamiento en Caspe, durante los meses de verano se fueron retomando poco a poco las competiciones mientras Irene trabajaba duro para retomar la forma física, sin embargo, sufrió una lesión y algún problema médico que le impidieron su objetivo. A pesar de todas las dificultades, parece ser que 2021 está siendo su año.
Seguirá en Estados Unidos para competir en Orlando y Florida las próximas semanas. «No quiero ponerme mucha presión, lo que busco es continuar en la misma dinámica, estar mentalmente bien y no rendirme aunque vaya con el marcador por abajo», afirma Burillo. «Ahora no quiero obsesionarme mucho con el resultado, solo jugar lo mejor posible y tener ambición de seguir haciéndolo bien». Está a unos 30-50 puntos de conseguir su meta: llegar a los puestos de las 250 mejores tenistas del mundo.
Pedro Obon dice
Ánimo Irene. Te mereces lo mejor. Mucha fuerza y ánimo.