Educación ha confirmado el inicio de las labores para acoger a los 510 alumnos
Tras años de reivindicaciones y dos cursos con las aulas prefabricadas, el colegio Alejo Lorén de Caspe contará para el próximo año con nuevas instalaciones. El departamento de Educación ha confirmado al Justicia de Aragón, tras una sugerencia de la institución, que el próximo año ejecutará las obras necesarias para garantizar la accesibilidad de las instalaciones y la construcción de nuevas aulas con las que acoger a los 510 alumnos que tiene el centro en la actualidad.
La petición de Fernando García Vicente, Justicia de Aragón, se remitió tras una reunión que mantuvo con la Asociación de Padres y Madres de este centro educativo en la que le dieron a conocer la situación de este edificio, que se ha quedado pequeño y obsoleto con el aumento pronunciado de estudiantes en los últimos años. En una de sus recientes visitas García Vicente conoció la problemática. Desde DGA han informado que los técnicos del departamento se encuentran en estos momentos elaborando el proyecto en el que se especifican estas obras y la intención es iniciar las labores en el verano del 2017. «El objetivo es subir un piso más el edificio y para ello se lleva intención de hacerlo en los meses de julio y agosto cuando no haya alumnos en el centro», confirman desde el departamento. Concretamente, el proyecto consistirá en levantar una nueva edificación sobre el pabellón, que se construyó en el año 2003 y que actualmente dispone de planta baja y una planta alzada. Esta nueva construcción supondría cinco aulas más para el centro que tiene prácticamente todos los cursos triplicados. Cabe recalcar que el centro educativo cuenta desde hace dos cursos con un par de aulas prefabricadas en el patio delantero del recinto. En este sentido, el Justicia de Aragón incide en que estos módulos deben tener «un carácter provisional» para dar respuesta puntual a un número de alumnos imprevisto y no un asentamiento permanente.
Por otro lado, la institución, una de las más antiguas de Aragón, también ha trasladado al centro el alto porcentaje de alumnado inmigrante y la necesidad de un aula de integración lingüística, otra de las reivindicaciones de profesorado y padres. Al respecto el Servicio Provincial ha asegurado que se está realizando un estudio en una serie de centros con una problemática similar con el fin de definir una estrategia de actuación preferente.